Día feriado, el último de un fin de semana XL. El comercio decidió abrir sus puertas en una apuesta un tanto arriesgada para una jornada donde la mayoría de las actividades está sin funcionar, desde bancos hasta administración pública.
La idea de la Cámara de Comercio de San Juan es tratar de apuntalar las ventas en momentos donde los ingresos a los negocios son escasos, todavía con resabios de la pandemia.
DIARIO DE CUYO recorrió el microcentro y se observó que la mayoría de los negocios decidieron levantar sus percianas, con algunas excepciones un tanto llamativas como Falabella (que anunció que cierra a fines de marzo y está en plena liquidación) y algunas casas de calzado.
El público respondió a medias. Fue más bien escaso y buena parte aprovechó para pasear por el centro en un día donde el buen tiempo invita a salir, pero fueron los menos los que compraron.
La apertura de los comercios fue en su horario habitual.