-¿Qué significa para vos la danza?

-Siento que el baile es una pasión y algo que me permite sentirme yo misma. Además, la danza me aleja de todos los peligros.

-¿Qué quiere decir eso?

-A la droga y al alcohol. Hay en todos lados y tenés que ser fuerte para no caer en la tentación de probarlos y convertirte en adicto. Por eso uso como excusa que tengo que asistir a clase de danza y participar de festivales para no probar nada de esto cuando me lo ofrecen. Siempre aconsejo a los chicos que hagan danza o alguna actividad física que ayudan a mantener la salud, aprender valores y alejar los vicios.

-¿Sos muy familiera?

-Súper. Me gusta compartir todas las cosas con mi familia, a la que amo. Todos los días rezo para que no le pase nada malo.

-¿Tenés muchos amigos?

-No muchos, pero sí muy buenos. Es mejor calidad que cantidad.

-¿Qué te molesta?

-La falta de respeto y las quejas permanentes. Creo que hay que quejarse menos por lo que nos pasa y poner todas las energías en cambiarlo.

-¿Cuál es tu punto débil?

-La comida. Amo comer y no puedo hacer dieta aunque me lo proponga. Lo bueno es que con la danza gasto todas las calorías que ingiero.

-¿Qué es lo que más te gusta de vos a nivel físico?

-La cara porque creo que con ella transmito como soy por dentro y por fuera.

-¿Cómo te imaginás en un futuro?

-Me imagino recibida y trabajando en lo que me gusta. También me veo casada, con una gran familia y cumpliendo uno de mis sueños.

-¿Cuál es ese sueño?

-Trabajar en un geriátrico para lograr que los abuelos se sientan mejor bailando folclore y tomando sesiones de kinesiología. Mi sueño es combinar mis dos pasiones para mejorarles la calidad de vida a los abuelos.