"Yo le tengo gran respeto al humor, porque lo que importa no es que la gente se ría, sino de qué se ríe…’
"Tendría que ser muy rica pero no lo soy. Tengo como el lujo de haber gastado todo el dinero que gané y no me lo puse encima, porque no tengo ni visones ni brillantes ni automóviles ni nada. Vivo en una linda casa, vivo bien y me doy el gusto de ayudar a la gente’.
"Yo soy muy poco exigente para la televisión, me divierte la televisión, me ensarto y veo muchas cosas que a lo mejor hasta no hay que ver. Yo soy de las que apenas llega a casa prende la tele’.
"En mi caso no me puedo quejar, porque tengo 83 años y nunca tuve más trabajo, así que soy una agradecida de la vida. Lo que sí creo es que hoy la televisión es sexo, y el sexo a los 83 no combina mucho, entonces la juventud de los protagonistas hace que los viejos queden radiados’.
"Estoy en la meca. Pero hay un factor en la vida que no se puede negar: la suerte.’
"Siempre tengo ganas de hacer cosas. Ahora quiero hacer una comedia. Yo sé hacer reír a la gente, y la risa, en el mundo que vivimos, es como un aplauso. Me gustaría estar en el teatro y que todas las noches, después de reírse una hora y media, la gente salga mejor de lo que entró’.
"Ese gran amor murió y desde entonces fue todo distinto. Hubo otro, pero no fue lo mismo. Me hubiera gustado casarme y tener hijos, pero tuve una vida muy plena… tengo una vida muy plena’.
"Cuando voy allá (Uruguay) disfruto mucho, pero también extraño Buenos Aires… qué se yo… Tengo una relación idílica con mi familia, con las dos hermanas que me quedan y con mis sobrinos, que son como mis hijos heredados…’
"He vivido momentos difíciles, estuve prohibida durante los militares, tuve miedo, amigos desaparecidos que todavía duelen… nunca se puede olvidar del todo… pero sobrevivimos’.
"Hablo todo el tiempo con Él ¡y le digo de todo! Cuando estoy enojada lo trato de usted y por ahí le digo algunos insultos, pero livianitos (risas). La relación que tengo con Dios es un diálogo. Y lo que más le digo es gracias, por lo que hice y por lo que, si quiere, voy a poder hacer…’
"Y, el que no espere a la Parca es bobo, porque la Parca llega (risas). De esa no se salva nadie…’
"Yo no le puedo pedir más mimos a la vida, porque ya me ha dado de sobra.’
(Extractos de entrevistas
con DIARIO DE CUYO)