Tanto el entrenador Carlos Ischia como los futbolistas de Racing Club optaron por el silencio tras el revés sufrido anoche ante Atlético de Rafaela, por lo que lo único que se escuchó cerca del vestuario local en el Cilindro de Avellaneda fueron los insultos de una treintena de hinchas indignados por la paupérrima campaña del equipo. Al cierre de esta edición, versiones periodísticas de Buenos Aires indicaban que Ischia se aleja hoy del cargo.
