1- Compensar las raíces que se pierden durante el transplante. 2- Evitar un crecimiento denso que afecte la sanidad de la planta. 3- Dirigir el crecimiento para evitar desequilibrios en la forma. 4- Eliminar ramas muertas que pueden ser fuente de propagación de enfermedades. 5- Quitar o cortar ramas que molesten o dificulten la circulación. 6- Favorecer o estimular la producción de flores y frutos.
