– ¿Cómo se prepara para los actos?
– Como puedo. Cuando vi que llegó el momento me di cuenta cuántas cosas me quedaron por hacer, pero tengo mucha alegría.
– ¿Siente ansiedad o nervios?
– Yo estoy con una emoción muy linda. No tengo nervios, ya me siento en casa. La ansiedad más grande la tuve antes de llegar a San Juan, porque venía a un lugar que no conocía. Ahora tengo menos interrogante que los que tenía el 3 de noviembre. Ahora tengo más contacto con la comunidad.
-¿Qué buscará hacer en San Juan?
– El Consejo Pastoral, que acá no existe. Se trata de un grupo de laicos, religiosas, sacerdotes y representantes de las parroquias donde se nos permita escuchar voces diversas y poder definir el rumbo para caminar. Es un sistema que ayuda mucho, al menos eso lo vi en las diócesis donde estuve. Uno sólo se puede equivocar y 15 personas también, pero realmente es bueno porque se comparten distintas miradas.
– ¿Qué mensaje les dejaría a los sanjuaninos?
– Que intentemos amar a Jesús. El papa Francisco nos convoca a una iglesia en salida. En mis visitas a las parroquias, me pidieron que los ayude a ser más misioneros. El compromiso es acercarnos a la gente. Además aprovecho para invitar a todos para mañana -por los actos de hoy-. Espero a los creyentes y no creyentes. Y, los que no vengan igual quiero que sepan que los queremos, no soy obispo solamente de la feligresía católica.