El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, destacó ayer la calidez del Papa en sus saludos tras la ceremonia de entronización. Desde el Vaticano, Macri contó que el propio Papa pidió a sus colaboradores que lo fueran a buscar a la Plaza San Pedro para que junto a su esposa se acercara a él.
‘Cuando me ve me dice: ‘Pero, cómo, no me la trajo a Antonia?‘ y yo le dije: ‘Hoy la veo complicada, no me parece un día apropiado‘, contó el jefe de Gobierno porteño, entre risas, sin ocultar su emoción.
En declaraciones a las radios 10 y La Red, Macri abogó para que ‘Dios permita que empiece una nueva etapa en la que podamos trabajar juntos. Ojalá todo esto haya conmovido a la Presidenta (Cristina Fernández) y empiece una nueva etapa de reconciliación de los argentinos‘.
