Aunque su uso está prohibido por ley por reducir la visión y alterar el sentido de distancia, los vidrios polarizados en los automóviles siguen copando las calles. Incluso desde los talleres donde hacen este trabajo dijeron que actualmente polarizan vidrios todos los días del año, mientras que antes la demanda sólo surgía en verano. Contaron que la gente los elige por seguridad porque creen que si no se ve lo que hay dentro del auto, no se lo van a robar. Pero es también argumentando razones de seguridad que el titular del Primer Juzgado de Faltas provincial, Horacio Morando, quiere frenar su uso. El magistrado sostuvo que en los últimos tiempos ha notado un incremento de accidentes y robos protagonizados por vehículos con este tipo de vidrios. Y que por eso ha pedido tanto a la Policía como a Gendarmería que intensifiquen la exigencia de este requisito para circular.
El magistrado sostuvo que hizo este pedido a las fuerzas de seguridad porque es notable el crecimiento de esta moda que es peligrosa y que se multa poco. "No sé con exactitud cuántos vehículos con vidrios polarizados hay en la provincia, pero a simple vista se ve que son muchos. Pero en lo que va del año sólo he recibido 3 actas de infracción por este motivo -sostuvo el juez Morando-. Es por eso que de manera escrita he pedido más rigurosidad a la hora de exigir el cumplimiento de los requisitos para poder circular".
Más allá de la ley, en la provincia hay varios negocios donde polarizan vehículos y fueron sus propios dueños quienes hablaron de una tendencia en alza. "Antes polarizábamos unos 6 autos por semana, ahora esa cantidad la hacemos por día -contó Rubén Martínez, desde uno de los negocios de este rubro-. El crecimiento se registra desde hace unos 2 años". Por su parte Martín Claros, también propietario de unos de estos locales, contó que por día polariza entre 5 y 7 autos, el 99% 0km. Dijo que contrariamente a lo que se cree no son los jóvenes quienes los eligen, ni el tuneado es el motivo principal para hacerlo. "El 90% de mis clientes son personas mayores, y sobre todo mujeres -sostuvo-. Polarizan el auto para que no se vea que es una mujer la que lo conduce y sea más fácil robarles. El polarizado completo cuesta 350 pesos".
En tanto el juez Morando sostuvo que el incremento de esta tendencia también puede deberse un poco a las confusiones que puede generar la Ley de Tránsito 24.449. Dijo que en su artículo 30, inciso f, menciona que los "automotores deben tener vidrios de seguridad o elementos transparentes similares, normalizados y con el grado de tonalidad adecuados". Sostuvo que éste hace referencia a que no se puede alterar las condiciones de fabricación de los vehículos, incluidos los vidrios.
"Algunos dicen que está permitido polarizar todos los vidrios, menos el parabrisas, o hacerlo en el tono más claro que haya. No es así -aclaró el magistrado-. Sí está permitido, por ejemplo, los vidrios tonalizados que los autos traen de fábrica porque el tono está incorporado al vidrio, no como el polarizado, que es una lámina que se adosa al cristal y reduce la visión del conductor".
Morando también aclaró que hay vehículos autorizados a circular con vidrios polarizados, como los de los funcionarios provinciales, pero que es la Dirección de Tránsito y Transporte de la provincia la encargada de dar las autorizaciones, y que desconoce qué tienen en cuenta para hacerlo. DIARIO DE CUYO intentó comunicarse con responsables de esta dependencia, pero ninguno contestó el llamado.
La multa por circular en auto con vidrios polarizados, sin autorización previa, es de 150 UF (unidades fijas, que equivalen a 150 litros de nafta súper), es decir, unos 750 pesos.