El microondas es uno de los electrodomésticos más presentes actualmente en la cocina. Son pocas las personas que carecen de este elemento, cuya practicidad es altísima y cuyos usos son prácticamente infinitos. Calentar la comida de manera rápida y efectiva, cocinar algunos alimentos, descongelar ciertos productos, entre otros, son algunos de los usos más comunes que se le suele dar a este pequeño electrodoméstico.
Más allá de su versatilidad, el microondas tiene sus limitaciones. No todos los productos se pueden introducir y calentar allí; de hecho no es seguro poner cualquier cosa dentro de este electrodoméstico, dado que podría, en algunos casos, resultar perjudicial para la salud.
No hervir agua en el microondas, pero ¿por qué?
Es cierto que es una afirmación que se suele escuchar con frecuencia. "No hay que calentar ni hervir agua en un microondas". Sin embargo, es probable que la mayoría de las personas desconozca el motivo real de esa recomendación. El fundamento radica en la forma en que se calientan los líquidos en el microondas. Precisamente esas ondas se transmiten como energía al líquido que hay en los alimentos, por lo que a la hora de calentar el agua sola hay una gran diferencia con una pava común, una olla, un jarrito o una pava eléctrica.
En cualquiera de los dispositivos mencionados, se calienta el fondo y el líquido más caliente sube, mientras que baja el de la menor temperatura. Pero en el microondas el agua se calienta de una manera homogénea. Como consecuencia de ello, la liberación del oxígeno —la ebullición— ocurre instantáneamente, como si de una explosión se tratara. Esta reacción física que tiene el agua por la forma de calentar que tiene el microondas puede provocar severas quemaduras si la persona toma el recipiente con sus manos descubiertas o si, algo que también puede suceder, desconoce la probabilidad de esta reacción.
Huevos
Es por eso que tampoco deben cocinarse los huevos cerrados -con cáscara- dentro del microondas. El líquido que tiene dentro se puede convertir en vapor con el calor, pero el problema es que ese vapor no tiene a dónde ir, porque la cáscara es hermética. En consecuencia, puede que el huevo explote -literalmente hablando- dentro del horno microondas o, en el caso más severo, en las manos de la persona que lo saca de allí.
Es importante tener en cuenta que cualquier recipiente cerrado de manera hermética se comportará de la misma manera que el huevo con su cáscara. Si se calienta una sopa, por ejemplo, u otro alimento con mucho líquido, dentro de un contenedor cerrado puede explotar.
Frutas y verduras
Otro peligro derivado de calentar la comida en el microondas es que algunos productos pueden perder sus propiedades saludables.Muchas frutas o verduras, alimentos con alto contenido de vitaminas, pueden perder las propiedades nutritivas como consecuencia del calor. Sin embargo, esta reacción se produce de la misma forma si se calienta o cocina en el microondas o de cualquier otra manera. El cambio en las características del producto está relacionado con el calor que recibe y no con el tipo de calor.
Las gaseosas tampoco
Las gaseosas parecen una bebida como cualquier otra pero tienen una gran cantidad de componentes, además del azúcar, el sodio y las grasas. Uno de los componentes de los tipos light de estas bebidas es el aspartamo, que cuando se calienta se puede transformar en formaldehído y resultar altamente tóxico para el organismo. Es importante tener en cuenta que los síntomas de la intoxicación por este elemento son dolor de cabeza, debilidad, palidez, náuseas, vértigo, dificultad respiratoria, dolor de estómago, entre otros. Si por algún motivo el niño -porque afecta de manera aguda y severa a los niños- ha consumido una bebida azucarada caliente y presenta estas manifestaciones es esencial consultar con un especialista y comunicarle esa situación.
Chocolate
El chocolate es otro de los alimentos que no se debe introducir en el microondas. Si bien no tendría un efecto tóxico sobre el cuerpo, lo cierto es que es un producto que se quema cuando se lo calienta de esa manera. Aunque se ponga durante pocos segundos, el chocolate sufre un cambio en su composición y se quema, por lo que su sabor no va a ser sabroso y podría arruinar cualquier preparación.
Leche
Al calentar la leche en este electrodoméstico puede perder la mitad de los nutrientes que proporciona, además de eliminar parte de la vitamina B12 en un 40%.Pero no es el único lácteo que se desaconseja poner en el microondas. La manteca -también sucede con la margarina, aunque no es un lácteo- pueden perder el poco valor proteico que tienen de por sí, ya que la manera en que emite calor el electrodoméstico no es buena para estos alimentos. Además, es mejor no poner en el microondas un trozo grande porque, como calienta de manera desigual, algunas partes podrían quedar más calientes que otras.
Carnes procesadas
Las salchichas, chorizo, panceta, hamburguesas y otras carnes procesadas llevan conservantes y sustancias químicas que permiten que se conserven durante más tiempo. Sin embargo, al recalentar estas carnes en el microondas, se generan en sus componentes COPs (productos de colesterol oxidado) que dañan sus bacterias y las vuelven tóxicas para el consumo humano.
Recipientes de comida a domicilio
A veces aprovechamos los envases del delivery para guardarlos en la heladera, pero a la hora de calentar el plato en el microondas, es mejor no usar este envoltorio por dos razones: los gases tóxicos que pueden emitir o incluso la posibilidad de que se queme el propio recipiente –sea de plástico, cartón o papel–. A no ser que el envase especifique que el recipiente es apto para microondas, es mejor calentar la comida en un plato normal.En el caso de que sí se especifique en el envase, es recomendable no meter nunca en el electrodoméstico las tapas con base de aluminio, y evitar los papeles o cartones con dibujos. La tinta podría evaporarse y mezclarse con la comida.
Recipiente de espuma de poliestireno
El poliestireno es un tipo de plástico muy utilizado en el envasado de alimentos. Los recipientes de este material no son aptos para calentar en el microondas, puesto que emiten toxinas que pueden causar enfermedades y arruinar la comida. No obstante, algunas variedades de poliestireno poseen una etiqueta que especifica "seguro para microondas".