La gripe, el resfrío, neumonía, bronquiolitis, influenza y el covid-19 son las enfermedades más prevalente en época invernal, son contagiosas y afectan más a niños y adultos mayores, señalaron especialistas, quienes recomendaron lavarse periódicamente las manos, ventilar los ambientes y mantener los esquemas de vacunación al día para cuidarse frente a estas afecciones.
El presidente de la Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica (AAAeIC), Maximiliano Gómez, explicó que hay que distinguir las enfermedades contagiosas de las no contagiosas. "Cuando no tenemos antecedentes y de repente iniciamos con fiebre, tos, mucosidad y flema acompañados de dolor que puede ser a nivel de la garganta, pecho y dolor corporal es indicativo de una enfermedad contagiosa infecciosa", detalló.
Los resfríos se caracterizan por estornudos y secreción acuosa nasal, lagrimeo y suelen estar acompañados por fiebre moderada y dolor de garganta, con ocasional dolor de cabeza pero sin comprometer el estado general de la persona. A su vez, la gripe tiene síntomas similares al resfrío, pero provoca además malestar general, dolor corporal y fiebre, y ocasionalmente puede provocar tos, que en general es seca, mientras que los resfríos pueden dar tos si cae mucosidad desde la nariz a la garganta. Ambas enfermedades suelen ser características de esta estación, a diferencia de la neumonía, que puede aparecer en cualquier época del año porque "depende del estado inmunológico de las personas, aunque es más frecuente en época de frío", explicó Gómez. En ese sentido, la neumonía se caracteriza por fiebre y tos productiva con mucosidad de color (no es blanca o transparente como en la gripe o resfrío) y dolor localizado en el tórax, con afectación del estado general de la persona (malestar o decaimiento).
"Las personas más susceptibles a estas enfermedades son los niños y los adultos mayores que ya de por sí tienen una inmunidad un poco más baja que una persona adulta o un joven", explicó la neumonóloga Ana Stok.
Y agregó que en los más pequeños estas virosis pueden llevar a la bronquiolitis, que es una inflamación aguda de los bronquios que conduce a que el niño pueda tener tos severa, fiebre, en algunos casos con secreciones y silbidos al respirar.
Las señales para detectar en niños posibles infecciones respiratorias son: respiración rápida, con silbidos o ronquidos, si se le hunde el pecho al respirar, y si tiene más de 38 grados de fiebre. Además, presencia de mocos, pérdida del apetito, si no puede beber o amamantarse o si está decaído.
Las infecciones respiratorias agudas bajas (IRAB) son enfermedades que afectan los oídos, nariz y garganta hasta los pulmones. Son ocasionadas en su mayoría por virus, aunque también pueden ser bacterias o parásitos, que se transmiten de persona a persona a través de las gotitas de saliva que expulsamos al toser o estornudar y también puede ser por contacto directo con superficies contaminadas como manijas de puertas, barandas de transporte público, mesas, entre otros. Por lo general, no requieren de antibióticos para su tratamiento y no suelen durar más de quince días, en casos leves.
En ese sentido, para prevenir enfermedades respiratorias es importante lavarse las manos periódicamente, especialmente después de tocar manijas, dinero, objetos de oficina, juguetes de otros niños, etc. Además, recomendó usar alcohol en gel cuando no haya agua y jabón para lavarse las manos; toser y estornudar cubriéndose la boca y la nariz con el codo; y limpiarse la nariz con pañuelos descartables. También evitar el humo de cigarrillos y los braseros cerca de los niños; ventilar los ambientes; y mantener los esquemas de vacunación al día.
En el caso de las enfermedades no infecciosas, que incluyen a las alergias, se exacerban las rinitis. La manera de diferenciar una rinitis por el frío de una gripe o un proceso infeccioso, es que en el caso de no ser infeccioso la persona va a toser o expectorar de color claro y la expectoración no es verdosa ni amarillenta ni turbulenta. Tampoco tiene fiebre, y puede estar con los ojos rojos, congestión nasal y estornudos.
> Los más aconsejable
Lo más recomendable es una alimentación variada que incluya frutas, con aporte de vitaminas y minerales necesarios para reforzar el sistema inmune, una actividad física regular, y evitar fumar en cualquiera de sus variedades para fortalecer el sistema respiratorio.