Los científicos están usando sangre de cangrejo para investigar una posible vacuna contra el coronavirus. Es que a través de esta experimentación, se aseguran que los nuevos medicamentos sean seguros.
Un extracto en las células sanguíneas del cangrejo reacciona químicamente a sustancias nocivas y los científicos lo usan para evaluar que no haya bacterias peligrosas en los medicamentos recién creado. Y es justamente la sangre de cangrejo herradura la único que los humanos pudieron encontrar que haga este efecto.
Cada año, cientos de miles de ejemplares son atrapados y llevados a laboratorios en Estados Unidos, donde se extrae parte de su sangre de una vena cerca de su corazón.
Luego son liberados nuevamente en la naturaleza. Pero en los últimos años, se estima que hasta un 30% muere debido a este procedimiento.
Sin embargo, si bien se han buscado otras alternativas, a las compañías que desean vender medicamentos en EE.UU. se les ha dicho que deben seguir usando sangre de cangrejo para las pruebas.
Eso significa que cualquier firma que pueda tener una vacuna contra el coronavirus deberá verificarla a la antigua usanza, con sangre azul, si quieren poder llegar a millones de estadounidenses.
Algunas compañías farmacéuticas dicen que pueden satisfacer la demanda de una vacuna contra el covid-19 sin tener que extraer sangre de muchos más cangrejos de lo normal.
La firma suiza Lonza comenzó este mes a fabricar una vacuna -que se pondrá a prueba en humanos- y que "no requerirá más de un día de producción" de sangre azul, dijo a la revista National Geographic.
Brummer señala que hay "al menos 30 empresas trabajando en una vacuna" y "cada una de ellas tiene que pasar por estas pruebas".
"Así que mi preocupación es sobre la población de los cangrejos herradura, porque son una parte clave del ecosistema", concluyó.