Cada 7 de mayo se celebra el Día Mundial de la Masturbación, una fecha que nació en 1995 en San Francisco, Estados Unidos, con el propósito de visibilizar esta práctica y poder hablar abiertamente de sus beneficios en la salud.

El día quedó institucionalizado a partir de un discurso de la doctora Joycelyn Elders, durante la celebración del Día de las Naciones Unidas contra el SIDA, donde aseguró que la masturbación debería tomarse como un método de prevención para evitar que los jóvenes participen en actividades sexuales más riesgosas. "Creo que es parte de la sexualidad humana, y tal vez debería enseñarse", sostuvo.

Este controversial comentario le valió el rechazo de la Casa Blanca, pero ayudó a establecer el mes de mayo como el Mes de la Masturbación; y poco después, convertirla en una fecha con alcance mundial.

A pesar de que este festejo tiene más de dos décadas, la masturbación es considerado un tema tabú, por lo que muchas personas desconocen los múltiples beneficios de esta práctica sana y segura.

En el caso de los hombres, fortalece el sistema inmunológico, protege la próstata y reduce el riesgo de cáncer en esta glándula; mientras que en las mujeres reduce el dolor premenstrual, combate las infecciones vaginales y el dolor crónico de espalda.

Masturbarse para evitar el coronavirus

Muchos países, entre ellos la Argentina, recomienda el "sexting" (intercambio de textos o fotografías explícitas por internet) y la masturbación para evitar contagios de COVID-19.

Dos factores motivaron esta recomendación: la imposibilidad de encontrarse con personas "cara a cara" y así transmitir el coronavirus a través de besos o sexo oral, aunque no hay estudios que avalen que la enfermedad pueda propagarse a través del semen y de las secreciones de la vagina y el recto.

Los reportes de salud de los países coinciden en otro aspecto importante. Es que la masturbación es una gran solución para los altisímos niveles de estrés y ansiedad que evidecian las personas en el encierro por la pandemia.