Tras saltar a la fama como la chica del clima, y luego de crecer y lograr sus cometidos artísticos, el presente dice que Sol Pérez (25) es mucho más que una moda. Desde hace tiempo, y en franco ascenso, la rubia es una mujer que logró cumplir su sueño para destacarse y robarse todas las miradas.
Hoy su repercusión es distinta a la de los primeros días, en los que sólo se hablaba de ella en virtud de sus atributos físicos. Más plantada, con un camino bien recorrido, supo cobrar una popularidad que le permite ser una de las figuras que más se destacan en esta temporada teatral. Cuando el espectáculo se plancha como el mar calmo, ella es la ola que rompe el molde y saca a todos del letargo.
Amor. Es una de las diosas del momento, a su belleza le suma simpatía. Sin embargo, no se le conocen compañeros sentimentales. Una persona que le llegue al corazón. Si bien confiesa que hay candidatos dando vueltas, hoy su prioridad es el trabajo. Probó con futbolistas, pero no le dio resultado. Incluso, en alguna oportunidad manifestó que se separó de Lisandro Magallán, ex defensor de Boca, porque se enteró de que en los entrenamientos contaba cosas íntimas.
El mismísimo Matías Alé fue por ella, pero no logró su cometido. Ramos de flores, mensajes románticos, pero no hubo caso. “Con las redes sociales es todo más directo, pero más complejo. Vos apostás por algo serio y ves que el tipo le está dando like a minas por todos lados. A esta altura no busco enamorarme y no le dedicaría ni un minuto de mi tiempo a otra persona, ¡pero porque tampoco lo tengo! Algún que otro candidato hay, pero no tengo libre ni los fines de semana”, explica.
De armas tomar. Con una personalidad arrolladora, la rubia no suele guardarse nada. A paso firme y con la frente en alto, pasa por encima de quien se interponga en su camino. De lengua filosa, no le importa la represalia. La competencia por quien lidera la taquilla marplatense está cabeza a cabeza. Con las populosas funciones de los últimos días.
Nuevamente juntos trepó al primer lugar desplazando a Sugar. Sol se refirió a este grato momento y también aprovechó para direccionar sus dardos hacia Laura Fernández. “Hay un sabor especial por ganarle a una obra que le fue muy bien durante todo el año. Ganarle a Laurita no me llena más ni menos, pero es espectacular ganarle a un buen producto”.