La cebada, un grano antiguo rico en fibra y proteínas, le da al plato una textura más firme y un sabor más intenso. Además, la combinación de cebada y hongos crea una sinergia de sabores que te sorprenderá. ¡Prepárate para disfrutar de un plato reconfortante y saludable!
- Cebada: Un grano ancestral con muchos beneficios: La cebada es un grano integral rico en fibra, lo que ayuda a mejorar la digestión y a mantener los niveles de azúcar en la sangre estables. Además, es una buena fuente de proteínas vegetales y minerales como el magnesio y el fósforo.
- Hongos: Un tesoro nutricional: Los hongos son bajos en calorías y ricos en vitaminas del grupo B, selenio y antioxidantes. Además, aportan una textura carnosa y un sabor umami que complementa a la perfección la cebada.
- Combinación perfecta: La combinación de cebada y hongos crea un plato nutritivo y equilibrado, ideal para vegetarianos y veganos.
- Versatilidad: El risotto de cebada es muy versátil y se puede adaptar a diferentes gustos y dietas. Puedes agregarle diferentes tipos de hongos, quesos,
Receta de Risotto cremoso de cebada y hongos
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo de cocción: 20 minutos
- Tiempo total de la receta: 35 minutos
- Porción: 4 porciones
Ingredientes:
- Cebada 250 g
- Hongos shitake/porcini secos 50g
- Caldo de verduras c/n
- Sal 1 cdita
- Aceite de oliva c/n
- Pimienta negra c/n
- Nuez moscada c/n
Preparación:
- Hidratar los hongos en agua caliente ó té ahumado (lapsang) por 20 minutos o hasta que estén tiernos. Reservar.
- Cocinar la cebada perlada junto con el caldo de verduras por 20 minutos.
- Incorporar con los condimentos, junto con los hongos.
- Finalizar con aceite de oliva.
- Servir y disfrutar
Tips Culinarios para una Receta Exquisita:
- Tostar la cebada: Tostar la cebada en una sartén antes de agregar el caldo realza su sabor y crea una base más aromática para el risotto.
- Caldo de calidad: Utiliza un caldo de verduras casero o de buena calidad para darle más sabor al risotto.
- Cocción lenta: Cocina el risotto a fuego bajo y revuelve constantemente para liberar el almidón de la cebada y crear una textura cremosa.
- Añadir líquido gradualmente: Agrega el caldo de a poco, permitiendo que la cebada absorba cada porción antes de agregar más.
- Queso al final: Incorpora el queso rallado al final de la cocción para que se derrita y cree una capa cremosa en la superficie del risotto.
- Textura al dente: La cebada debe quedar al dente, con un ligero crujiente en el centro.
- Acompañamientos: Sirve el risotto con una ensalada fresca, pan de ajo o un vino tinto ligero.
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