Marcha atrás tras las críticas
Los senadores resolvieron dar marcha atrás con la decisión de aumentar sus dietas drásticamente. Lo hicieron mediante una nota que firmaron todos los bloques. Los ingresos de los legisladores estaban “enganchados” a los aumentos que recibían los empleados del Congreso, más allá de que sus dietas tenían valores mucho más altos, por lo cual, ante una suba similar, los montos escalaban de manera exponencial. Con la nota, los senadores de todos los bloques decidieron que van a aplicar otra modalidad de aumentos y que no recibirán esta última actualización.
La “fórmula”
En abril, los senadores llevaron al recinto y aprobaron un proyecto que establece que las dietas pasarán a estar conformadas por 2500 módulos, más un adicional de 1000 módulos por gastos de representación y 500 módulos de adicional por desarraigo. La iniciativa que se autogestionaron en aquella ocasión los senadores agregó una dieta más a las 12 que existían antes, para compensar el aguinaldo.