Este martes cerca del mediodía, Monseñor Jorge Lozano presidió la ceremonia religiosa por el Día de la Independencia, en la Catedral de la Cuidad de San Juan. En el Tedeum, además participó el vicegobernador Fabián Martín y el gabinete del gobernador Marcelo Orrego, quien firmó el Pacto de Mayo este lunes en la noche junto al presidente Javier Milei, en Tucumán.

En este marco, el arzobispo de la provincia sostuvo en su discurso que “los retratos de aquellos hombres parecen haber superado las barreras del tiempo haciendo de testigos y alentándonos a tomar con carnadura propia esos nobles ideales” y no olvidó mencionar a los sanjuaninos que fueron parte de ese evento histórico como Francisco Narciso de Laprida y Fray Justo Santa María de Oro.

Lozano dijo que el Papa Francisco “nos enseña que en la construcción social y política el tiempo es superior al espacio” y sostuvo: “Nos sentimos tironeados entre la coyuntura que reclama respuestas inmediatas, y el horizonte hacia el cual queremos caminar”.

Asimismo, remarcó que “los Diputados no coincidían en todo, y reconocían tener serias diferencias entre sí, fruto también de los pareceres de aquellos a quienes representaban. No obstante les unía la búsqueda del interés superior del futuro de una Nación independiente de cualquier tipo de dominación”.

Posteriormente, dijo que no se debe pasar por alto “los acontecimientos de los cuales estamos haciendo memoria agradecida, se desarrollaron en una casa de familia prestada para que los Congresales pudieran reunirse, debatir, intercambiar ideas y llegar a algunos acuerdos”.

Para finalizar, destacó que “la gesta libertadora del general San Martín llevó mucho tiempo madurando en su corazón e imaginación. Pero supo esperar la Declaración de la Independencia para que su Ejército tuviera la legitimidad necesaria de actuar en nombre de una Nación soberana. Pido a Dios nos ayude a construir una Patria de hermanos”.