En lo que va del año se registraron 300 casos de violencia contra los ancianos, que se suman a los 500 que hubo en el último semestre del 2016. Con estos datos oficiales, proporcionados por la Dirección de Políticas para el Adulto Mayor, dependiente del Ministerio de Desarrollo Humano, se reveló que al mes hay 80 abuelos maltratados en promedio, es decir, más de dos por día. Las razones del maltrato que reciben son diversas, aunque la causa más común es el abuso económico, según dijo Mabel Morales, a cargo del área mencionada.

La funcionaria destacó como positivo que la gente se anime cada vez más 
a dar aviso sobre estos casos y que el 90% de ellos se resuelve sin llegar a la Justicia. Esta semana ingresó a la Cámara de Diputados un proyecto de ley sobre el abordaje preventivo, el tratamiento y la protección social del adulto mayor víctima de maltrato. 

“Los abuelos se convierten en rehenes de sus propios familiares o allegados cuando hay un bien de por medio”. De esta manera, Mabel Morales se refirió a la violencia económica que padecen los ancianos. Agregó que son muchas las variables que usan los agresores para llevar a la práctica este tipo de maltrato.

“Tenemos casos donde a los abuelos le quitan la plata que cobra de jubilación, les usurpan las casas o los usan para que saquen un préstamo y luego estafarlos. Todo esto termina por generar un maltrato contra los ancianos y un abandono, porque hay quienes a quienes le quitan la plata que tienen para comer o comprar los remedios”, dijo Morales.

La funcionara agregó que estos abusos hacia los ancianos son ejercidos, por lo general, por los hijos, nietos, sobrinos y demás familiares que suelen justificar sus actos violentos con argumentos muy comunes como: que “sólo están protegiendo” su dinero o propiedades para que otros parientes no lo hagan; que “administran” los valores y bienes porque la víctima no está capacitada para hacerlo; que sólo cuidan los bienes que van a heredar en un futuro; que lo hacen para “cobrarse” por la mala situación que el pariente mayor les hizo pasar en alguna ocasión o por el tiempo y el trabajo de cuidarlos; entre otras excusas.

Luego de la violencia económica, el maltrato psicológico y el abandono son otras situaciones más frecuentes de las que son víctimas los ancianos, aunque muchas veces como consecuencia de otros factores. “Algunos abuelos viven con sus hijos que tienen sus propias familias y problemas. Y a veces no reciben los cuidados necesarios porque sus familiares trabajan todo el día y no porque tengan la intención de maltratarlos. Lo bueno es que con la intervención del equipo técnico de la Dirección de Políticas para el Adulto Mayor, la mayoría de los casos se resuelve sin llegar a la Justicia”, dijo Morales.

La funcionaria agregó que el 90% de los casos de violencia o maltrato de ancianos se resuelve con la mediación y que sólo el 10% se judicializa. También destacó que de los 80 casos de maltrato que se registran al mes, casi ninguno es de violencia física. Pero sostuvo que los que incluyen golpes son los que conmocionan más al equipo técnico.

Adela tiene 70 años y durante 10 soportó el maltrato psicológico y físico por parte de su hija. Varias veces intentó buscar ayuda, pero siempre se arrepintió antes de ingresar a la comisaría y hacer la denuncia. Tenía miedo de que el juez decidiera trasladarla a otro hogar y tuviera que dejar a su nieta sola, a merced de la agresividad de su madre. Finalmente decidió denunciar a su agresora. Fue luego de que esta última le golpeara la cabeza contra la pared y la dejara inconsciente.