El vicepresidente de la Nación, Amado Boudou, a cargo del Ejecutivo nacional, realizó ayer una fugaz visita a San Juan para saludar a la familia del gobernador José Luis Gioja e interiorizarse por su estado de salud, tras la caída del helicóptero en Valle Fértil. El presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, quien se suma a una larga lista de funcionarios y de gobernadores de otras provincias que han estado en San Juan tras el accidente (ver aparte), dijo que “tengo una expectativa enorme” por la recuperación del mandatario y sostuvo que “traigo el saludo de la Presidenta y que la familia sepa que cuenta con nosotros”.
El funcionario nacional, quien estuvo unos 45 minutos en San Juan, no respondió a preguntas de los periodistas sobre el resultado electoral del domingo ni sobre el panorama para los dos últimos años de gobierno de Cristina Fernández.
Llegó acompañado por el ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur, el secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli, y el secretario de Obras Públicas, José López.
Desde el aeropuerto se trasladó en una combi oficial directamente hasta el Hospital Rawson, donde fue recibido por el vicegobernador Sergio Uñac, a cargo del Ejecutivo local.
“Nuestra idea, desde lo institucional, pero sobre todo desde lo humano, es poder acompañar a la familia de José Luis, a su equipo de trabajo y a todo el pueblo de San Juan en esta circunstancia que nos ha conmovido a todos”, dijo Boudou a la salida. Estuvo reunido con la esposa del mandatario, Rosa Palacio, sus hijos y con el hermano, el intendente rawsino Juan Carlos Gioja. Allí también pudo dialogar con integrantes del equipo médico que atiende al Gobernador.
“Tenemos una expectativa enorme porque conocemos la fortaleza, la entereza y las ganas de vivir de ese amigo que es el Flaco Gioja”, dijo Boudou y reconoció que “es extraño estar en San Juan y no estar compartiendo una charla, una empanada con él, que tiene esa fuerza y esas ganas de vivir que pone todos los días, en las buenas y en las malas como lo demostró en los últimos tiempos”.
En la puerta de la Terapia Intensiva del Rawson, el Vicepresidente pidió “terminar con todas estas cuestiones de especulaciones o dichos, porque lo importante es lo que dicen los médicos, que son positivos, que están viendo una evolución más que razonable porque la verdad es que se dio un golpazo”.
“Es muy importante saber que en una provincia argentina está el equipamiento necesario, pero sobre todo que están los recursos humanos, ya que esto habla también de la recuperación que estamos haciendo como país entre todos”, agregó.
También felicitó al vicegobernador Uñac, “por la tarea que viene llevando adelante y la forma en que lo viene haciendo, sin grandilocuencia, sabiendo el rol que le toca, llevándolo con entereza y acompañando al equipo en momentos en que hay que articular más que nunca y hay que trabajar mucho”.
Antes, Uñac le había agradecido la visita “en nombre del Gobernador, de su familia, pero también de parte de todos los sanjuaninos”. Y destacó que Gioja “está siendo atendido en un hospital público en la provincia”.
Al término de la visita, Gastón, el hijo mayor del Gobernador, sostuvo sobre la gran cantidad de visitas que está recibiendo su padre que “no nos llama la atención, sabemos que es una persona muy querible, que se ha hecho querer mucho por su personalidad y carácter. Está cosechando todo lo que sembró”. Y agregó además que “los funcionarios que visitaron a mi viejo, se van bien, porque ven que está bien”.
Juan Carlos, el hermano del mandatario analizó la llegada del Vicepresidente al señalar que “habla de su hombría de bien. Es un gesto humano, solidario, y hay que anotarlo como tal”.
En el entorno del funcionario nacional aclararon que la corta visita se debía a que tenía que encabezar en la misma tarde de ayer el acto de inauguración de un nuevo tramo de la ruta nacional 38 en Tucumán.