La causa federal por el accidente aéreo que ocurrió en 2013, en el que falleció la diputada nacional Margarita Ferrá de Bartol y sufrieron graves heridas José Luis Gioja, Daniel Tomás y Héctor Pérez, tuvo un giro a favor de Aníbal Touris. Una pericia oficial, que fue solicitada por el fiscal Francisco Maldonado, desligó de responsabilidad al piloto al entender que no fue culpable de que el helicóptero haya impactado con una línea eléctrica y luego caído hacia un descampado. Así, dicho informe deberá ser analizado por el juez Leopoldo Rago Gallo, quien deberá definir la situación procesal del implicado. Esto es, si sostiene el procesamiento, si cambia su postura a una falta de mérito o si dicta el sobreseimiento del implicado.
Según indicaron las fuentes, el informe que favorece a Touris fue aportado por Luis Eduardo Malchiodi, un ingeniero Mecánico Aeronáutico convocado como perito de parte. Según el especialista, "el piloto no tuvo ninguna posibilidad de evitar el siniestro", ya que "no pudo de ninguna manera prevenir la magnitud del polvo en suspensión que se produjo al aplicar potencia" para despegar. Así, explicó que la causa del accidente fue que Touris se desorientó ya que la luz del sol generó un reflejo en la nube de polvo, lo que le impidió observar las referencias visuales "imprescindibles para mantener la orientación espacial". Además, sostuvo que "de no haber existido la línea eléctrica, es probable que la aeronave hubiera ascendido progresivamente" sin problemas, lo que hubiera permitido que el piloto saliera de la nube y se orientara para el viaje.
El escrito del perito ocurre casi siete años después de producido el accidente. Además, se dio luego de que en febrero del año pasado, la Cámara de Apelaciones de Mendoza le hiciera lugar al pedido de la defensa de Touris de revisar el fallo que dictó Rago Gallo a fines de 2018, en el que sostuvo el procesamiento contra el piloto. El magistrado local había mantenido su decisión, luego de que la Cámara de Mendoza dictara su falta de mérito y dispusiera que en la investigación se recabaran los testimonios que había pedido la defensa. Con el nuevo fallo en su contra, Touris volvió a apelar y la Cámara reiteró la falta de mérito y solicitó que se profundice la investigación, por lo que la Justicia, a través del fiscal de la causa, decidió convocar al perito.
Tras el cambio que solicitó la Cámara de Mendoza, fuentes de la causa indicaron que el informe del perito tiene un peso sustancial. Es que el tribunal de la vecina provincia le habían indicado a Rago Gallo que el informe de la Junta de Investigación de Accidentes de Aviación Civil (JIAAC) no podía considerarse como prueba determinante para procesar a Touris. Los expertos que investigan ese tipo de hechos habían complicado al piloto al indicar que no hubo una implementación de "acciones correctivas" en el tiempo adecuado y que se dio una "inadecuada planificación e iniciación del vuelo", entre los puntos centrales.
Según Malchiodi, "al reducirse repentinamente la visibilidad debido al reflejo de luz sobre la nube de polvo, el piloto quedó inmediatamente desorientado, sin referencia visual con el exterior". Con una condicionante, la nave "se mantuvo en vuelo estacionario, moviéndose dentro de la nube" lo que produjo "una inadvertida traslación lateral del helicóptero que no pudo ser detectado por el piloto", y las acciones correctivas "no pudieron ser implementadas en el tiempo adecuado sencillamente porque el piloto no podía saber del desplazamiento y, por lo tanto, si se encontraba en situación de riesgo o peligro".