Desde el periodista de un medio de Brasil hasta el hijo menor de cualquier vecino de la calle Las Heras, todos los que en forma directa o indirecta tienen relación con la Cumbre del Mercosur fueron acreditados o censados. En total, hasta ayer, había más de 6.000 personas que entregaron sus datos personales e incluso sus huellas digitales para poder circular dentro de los vallados de seguridad. Y todos ellos pasaron por varios filtros, donde fueron investigados hasta los antecedentes penales antes de recibir la aprobación de acreditación, según informaron fuentes de la Cancillería Argentina, que instaló su sede logística en el Centro Cultural José Amadeo Conte Grand.
Cada pedido de credencial o huella censada fue sometido a cinco controles: Cancillería, Presidencia de la Nación, Policía Federal, Policía de San Juan y la Interpol. "Si a alguna persona se le detectó, por ejemplo, antecedentes penales, su pedido de acreditación fue rechazado", dijo un miembro de Cancillería, que tiene a unos 60 empleados trabajando en el Conte Grand incluso hasta hoy.
Y justamente por estos filtros es que el proceso para conseguir la aprobación de cada una de las acreditaciones tardó 6 horas, según explicó personal de Cancillería. Ante la catarata de pedidos, este control generó un lógico retraso, por lo que entre el sábado y ayer debieron extender el horario de atención para la entrega de acreditaciones.
De acuerdo a Cancillería, unas 4.000 personas fueron acreditadas y 2.111 "ciudadanos" fueron censados. De los acreditados, se encuentran miembros de las diferentes comitivas, proveedores, personal de seguridad y periodistas. Mientras que entre los que en Cancillería denominan "ciudadanos", se incluyen los vecinos que viven dentro de las zonas valladas, sus allegados, los comerciantes y sus empleados. A los "ciudadanos" no se les entregó una credencial, sino que debieron registrarse pasando sus huellas digitales por un escáner (este procedimiento lo hizo también la Policía Federal, casa por casa).
A estas cifras se suman 530 vehículos registrados, tanto de los vecinos como de los remises contratados, de las fuerzas de seguridad y de los servicios y proveedores, los únicos que fueron habilitados para pasar por el anillo de seguridad.
Por otro lado, todos los vecinos censados o los que trabajan habitualmente dentro del área de seguridad que rodea al Centro Cívico hoy deberán pasar sus huellas por escáners portátiles para llegar a sus domicilios. Ayer se permitió el paso sin problemas, pero desde las 0 hasta las 20 de hoy, aproximadamente, nadie podrá penetrar el cerco sin acreditación o huella dactilar censada.

