El plenario de delegados de UDAP, el gremio mayoritario en la provincia, decidió ayer adherir al paro nacional convocado por el Congreso de Trabajadores Argentinos (CTA), lo que afectará hoy el dictado de clases en la provincia en las dos últimas horas de clases de cada turno. En la práctica, en la mañana los maestros abandonarán las aulas a partir de las 10:30 y por la tarde a las 15, según aclaró la titular del gremio, Graciela López.
La medida de fuerza es bajo la consigna de que "la crisis no la paguen los trabajadores" y en lo local en rechazo del último incremento salarial, al que consideran "insuficiente".
Las medidas de fuerza tienen lugar bajo el paraguas de la CTA y del gremio nacional de la educación CTERA, al que está adherido UDAP, porque el gremio local no puede convocar a paros por disposición de la Justicia. Ya recibió una multa de 35.000 pesos, un amparo lo obligó a volver a dictar clases y hasta hay una causa penal pendiente.
Consultada la ministra de Educación, Cristina Díaz, dijo a través de su secretaria que estaba al tanto de la convocatoria y que estaba estudiando las acciones a seguir con sus asesores.
Además de retirarse de las escuelas, los integrantes del cuerpo de delegados de UDAP se concentrarán a las 11 en la sede de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), en Rivadavia 524 este, el otro gremio que adhiere al paro en la provincia.
En el caso de ATE, el gremio convoca a los trabajadores estatales a abandonar la administración pública a las 10:30. Habrá una concentración y manifestación por las calles céntricas.
Entre otras demandas, la CTA pide la equiparación de las asignaciones familiares de los estatales provinciales con los nacionales, el otorgamiento de licencia por jornal de campaña y el pago de la permanencia en la categoría.
La última vez que UDAP convocó a un paro fue por 48 horas, el 18 y 19 de marzo pasado. Y completó un total de 4 días sin clases en lo que va del año.
