El Gobierno está mostrando un cambio en su política salarial. En los últimos 6 años se había concentrado en eliminar las sumas fijas de los recibos de sueldos de los estatales provinciales, incorporándolas a los básicos, pero ahora no descartan dar una suma fija como recomposición. A diferencia de los porcentajes, la suma fija es un monto sujeto a aportes de obra social y jubilación pero no es retributivo, es decir que no repercute en el cómputo de ítems como antigüedad y asignaciones especiales compensatorias, según explicó el secretario adjunto del sindicato UPCN, Gabriel Pacheco.
El dato lo confirmó el ministro de Gobierno, Emilio Fernández, que dijo que "no hay que descartar nada", respecto de qué forma tendría el aumento salarial que se sentarán a negociar con los gremios estatales a principios de marzo.
El funcionario justificó el viraje diciendo que "son momentos difíciles, donde los recursos son exiguos y en tiempos anormales las soluciones son las más racionales o las que se pueden dar en un determinado momento".
Apenas se conformó en 2004 la Mesa de Relaciones Laborales, que reúne en un ámbito de negociación a la parte oficial -ministros de Gobierno y de Hacienda- y a la parte sindical -ATE, UPCN, ATSA, Sitraviap y SOEME por un lado, y a los profesionales de la salud por otro, el Gobierno bajó como consigna su interés de "limpiar" de sumas fijas el sueldo de la administración pública, en pos de más beneficios para los trabajadores. El año pasado dio una de 50 pesos pero fue complementaria a un aumento del 9% a los básicos.
Hoy quedan algunas sumas fijas que en algunos casos representan el 40% del sueldo de los estatales de algunos sectores, dijo Pacheco, pero se ha ido evitando fijarlas como aumentos integrales y transformando con cada recomposición.
La parte oficial y la sindical coinciden en que la suma fija no es buena porque contribuye al "achatamiento" de la pirámide escalafonaria. Es decir, que si dan por ejemplo 100 pesos para todos, al de categorías bajas les repercute más y los acerca a los de escalafones superiores.
Consultado sobre si para el Gobierno hablar de una suma fija significa dar un paso atrás, Fernández contestó: "Yo creo que si podemos adecuar los salarios es un paso adelante". Y agregó que "la forma en que se haga será dentro de las posibilidades reales de la administración del gobierno, o sea si se puede avanzar algo en el tema salarial siempre es un paso adelante, ahora que la forma no sea la más ortodoxa eso hay que verlo en el momento de coyuntura y lo cierto y concreto es que este es un momento difícil".

