El Gobierno destinará un aumento de 2 millones de pesos por mes para mejorar los sueldos de los enfermeros que no tienen títulos universitarios (denominados auxiliares de enfermería), camilleros, mucamas, técnicos (radiólogos, bioquímicos, etc) y administrativos. El incremento de fondos se debe a que ayer, la Cámara de Diputados sancionó la ley que contempla el estatuto y escalafón de todo el personal de la sanidad (que son cerca de 3 mil), la cual comprende una recategorización y una mejora de los adicionales que reciben los empleados, que va del 10 al 35 por ciento, según la categoría.
La ley surgió fruto de 2 reclamos. Por un lado, el que lideró la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (ATSA), que planteó la necesidad de reformar la antigua norma (la 5.525) para jerarquizar a los empleados. “Es un reconocimiento a la actividad”, aseguró Alfredo Duarte, secretario general del gremio, quien explicó que, a partir de la flamante ley, cada lapsos de 2, 3, 5, 6 y 10 años (dependiendo del cargo) los agentes podrán ir ascendiendo, lo que conlleva a una mejora económica. “Hay gente que lleva 20 años sin un ascenso”, graficó. Además, el sindicalista dijo que la legislación estipula un aumento de los adicionales. El presentismo, que antes era una suma fija de 50 pesos, ahora será el 15 por ciento del básico de cada trabajador. En la categoría más baja, la 3, un empleado cobra alrededor de 3.500 pesos, según dijeron desde el gremio. La norma también fijó los porcentajes para otras bonificaciones como la actividad específica en los servicios de salud, que será del 45 por ciento del básico.
El otro reclamo que gestó la ley fue la protesta de los enfermeros universitarios, que poseen títulos de carreras de 3 y 5 años, quienes pedían que los dejaran fuera de la 5.525 y los incorporaran en la 2.580, que engloba a los médicos. Es que se trata de una ley de carrera para los profesionales, que implica una mayor remuneración. La norma aprobada ayer dispuso ese traspaso.