En la Cámara de Diputados quedó definido que habrá 7 bloques parlamentarios y todos han pedido lo que se llama estructura, es decir, una especie de planta política conformada por un director y un secretario. Sin embargo, fuentes calificadas dijeron que no habrá para todos porque la incorporación de esos funcionarios implica un gasto económico de 54 mil pesos mensuales por bloque y el objetivo es mantener las cuentas equilibradas. Por eso, por ahora perfilan 4: el justicialismo, el bloquismo y los frentes Compromiso con San Juan (CSJ), liderado por el basualdismo, y Juntos por San Juan, que nuclea al radicalismo y Dignidad Ciudadana.

El reglamento interno de la Cámara establece solamente que los diputados deben constituirse en bloques legislativos, mientras que la facultad de entregar la denominada estructura queda a criterio exclusivo del presidente de la Legislatura. Es decir, los legisladores pueden abrir los bloques que quieran, lo que no quiere decir que todos contarán con un director y un secretario. Los que se encaminan a no poseer la denominada estructura son los bloques Compromiso Federal, que reúne a 2 bloquistas disidentes; Actuar y Convicción Federal, ambos unipersonales. Los 3 se desprendieron de CSJ, pero trabajarán en conjunto. Las razones que se esgrimen por lo bajo tienen que ver con que, por un lado, no se justificaría otorgar una planta política para aquellos bloques conformados por un solo diputado. Marcelo Lima, el actual presidente de la Legislatura, cumplió el mismo rol en la gestión giojista del 2003 al 2007 y los antecedentes revelan que no les concedió estructura a los legisladores que se desprendieron del basualdismo y abrieron bloques unipersonales.

Una situación igual se dio bajo la gestión de Rubén Uñac, quien estuvo al frente de la Cámara del 2007 al 2011 y actualmente es vicepresidente primero. En ese entonces, se le negó la estructura de bloque a Enrique Castro, quien había dejado el basualdismo.

El otro caso que corre con pocas chances es el de Compromiso Federal. Si bien está conformado por 2 diputados (Edgardo Sancassani y César Aguilar), las fuentes pusieron bajo análisis su falta de representación partidaria, ya que ambos son bloquistas disidentes (que se alejaron de la estructura orgánica) e integraron la sociedad CSJ.

Al ser consultado, Lima fue prudente y dijo que aún no se ha tomado una resolución sobre los pedidos de estructura de bloque, la cual va a estar lista la próxima semana, con el aval de la asesoría letrada de la Legislatura. Además resaltó que se va a tener en cuenta el tema presupuestario, la constitución de los bloques por representación de partidos políticos y su cantidad de legisladores.

La posibilidad de contar con esa pequeña planta política es un aliciente para las fuerzas, ya que pueden designar personas de confianza, con un sueldo bien remunerado. Hoy un secretario de bloque está cobrando alrededor de 28 mil pesos y un director cerca de 26 mil, según fuentes legislativas. En el caso de no conseguir estructura, los titulares de cada bloque sí pueden participar en las reuniones de labor parlamentaria, en la que se define la agenda legislativa, y hacer uso de la palabra para fundamentar el voto cada vez que se trata una iniciativa.