El presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), Carlos Tizio, dio declaraciones ayer en el marco del primer encuentro del año de la Coviar en San Juan (ver recuadro) y levantó polvareda entre los viñateros de la provincia. El funcionario nacional se mostró a favor de la importación de vino, al señalar que "no es un fantasma" y "ojalá todos hubiéramos tenido un mercado abierto desde hace mucho". Las manifestaciones generaron resquemor entre los representantes de la Federación de Viñateros y la de Viñateros Independientes, los que señalaron que una apertura, en el escenario actual, repercutirá de forma negativa en el sector y los hará perder competitividad.
Así, Tizio, que presidió el organismo en la gestión macrista, se mostró en sintonía con la política de liberación del mercado del Gobierno nacional del libertario Javier Milei. Ante la consulta por la eventual compra de vino chileno a granel, como ya había ocurrido en la gestión de Cambiemos, expresó que, así como Argentina tiene acuerdos con el comercio mundial y "exportamos vino a países como Estados Unidos y Canadá, Chile es parte de ese grupo" y "tenemos que entender que, en un mercado libre y mundial, todo es una ida y vuelta", por lo que resaltó que son las reglas del juego. Sin hacer referencia a la protesta que viñateros realizaron el miércoles en Mendoza para pedir que intendentes intervengan ante formadores de precios por el valor del kilo de uva, remarcó que "es una locura fijar precios", además de agregar que "es muy fácil regular los precios y tratar de sacar provecho propio. Así estamos".
Tras los dichos, Eduardo Garcés, presidente de la Federación de Viñateros, señaló que "el libre mercado es horrible" porque al haber dos tipos de cambio en el país (dólar oficial y dólar blue), los productores pierden competitividad por la diferencia entre los costos de la moneda estadounidense". Así, explicó que "el gasoil, el abono y todo lo que tenga que ver para producir está a valor del dólar blue", más caro, mientras que, "cuando el productor va a exportar, ya sea mosto, uva, vino o cualquier otra cosa, lo tiene que hacer al valor de la divisa oficial", a menor valor. Por eso, manifestó que, ante esas condiciones, no se puede hablar de libre mercado porque "no existe".
Por otro lado, el viñatero recordó cuando, en 2017, la entrada de vino chileno a granel causó un sobrestock en el país, por lo que destacó que, si eso vuelve a pasar, los perjudicaría porque no compiten de igual a igual, dado que cuando los empresarios compran vino de afuera, lo hacen al precio de la divisa oficial, mientras que el producto local es más caro por los costos a valor del dólar paralelo. Además, habló de la calidad del vino del vecino país y comentó que las reglas del juego tampoco son iguales porque permiten que dicho producto tenga hasta un 7 por ciento de agua, cuando para la producción local es mucho menos, lo que tiene un impacto en los precios.
Por su parte, Juan José Ramos, de la Federación de Viñateros Independientes, también se mostró disconforme con la liberación de la economía y manifestó que "el libre mercado es posible cuando hay muchos compradores y vendedores, lo que no ocurre en el país. Hay pocas empresas que manejan casi el 60 por ciento del mercado nacional de exportación". Así, marcó diferencias con el presidente del INV al expresar que es necesario que el Estado sea mediador entre los industriales y los productores para que cada uno tenga su rentabilidad.
En cuanto a la importación, destacó que, años atrás, cuando se permitió la llegada de vino a granel, los precios locales cayeron, por lo que indicó que, si las condiciones no cambian, la producción de este año va a permitir la posibilidad de tener un mercado equilibrado.
Vicepresidencia
Al ser consultado por un eventual nombramiento para el cargo de vicepresidente del INV, Tizio expresó que, "si yo tengo que realizar una restructuración del Instituto, diría que no tendría que tener ni presidente", aunque aclaró que es algo que no le corresponde hacer. Al referirse al máximo cargo de conducción, señaló que tendría que ser "una persona de carrera que cumpla la función", ya que el INV "sólo es control y fiscalización".
Reunión de Coviar
Ayer se llevó a cabo el primer encuentro del directorio de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar) en la provincia. Si bien se trata de una reunión formal, el ministro de Producción, Trabajo e Innovación, Gustavo Fernández, dijo que realizaron la "evaluación de algunas acciones que ha venido haciendo el organismo vinculadas al sostenimiento de la actividad en el mercado interno y la implementación del plan estratégico que lleva adelante la institución".
Además de Fernández, en la mesa también estuvo su par mendocino Rodolfo Vargas Arizu, el presidente de la Coviar, Mario González, su vice José Alberto Zuccardi y el presidente del INV, Carlos Tizio.
En ese marco, el presidente de la Coviar dio un pantallazo de la situación que vive el sector y señaló que, actualmente, hay un contexto que los favorece a la hora de exportar. En ese sentido, remarcó la importancia de tener claras las reglas del juego y un tipo de cambio que achique la brecha, además de mantener las retenciones en cero, lo que les permitirá ser competitivos.