El anuncio presidencial de aumentar el mínimo no imponible sobre las cargas patronales de los trabajadores resultó "insuficiente" para los representantes de los sectores productivos de la provincia y del Gobierno sanjuanino, que esperaban más medidas, en particular para el sector viñatero que está próximo a iniciar la cosecha de uva para vinificar. El propio gobernador Sergio Uñac salió a decir que "al Estado nacional nada la interesan las economías regionales". Y pidió a los candidatos de Cambiemos en la provincia que "salgan a manifestarse" en defensa de los intereses locales.
Con referencia a este último planteo, el santaluceño Marcelo Orrego, candidato a gobernador del Frente Con Vos, alineado con Cambiemos, dio a conocer a través de su vocero de prensa que no iba a pronunciarse sobre el tema.
La medida anunciada por el presidente Mauricio Macri implica que ningún empleador va a pagar impuestos al trabajo por el personal que cobre hasta 17.500 pesos y para los trabajadores que perciban haberes por encima de esa cifra sólo abonarán la parte proporcional.
Según datos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), la medida beneficia a 200.000 trabajadores de todo el país y a 19.500 empresas. En el caso de San Juan son 11.000 los empleados incluidos en la ayuda.
Si bien se trata de una noticia buena para el sector productivo, que viene castigado por la baja de la actividad económica y el fuerte incremento de sus costos por la suba de tarifas y de los insumos, generó gusto "a poco" porque se había creado mucha expectativa en torno al anuncio presidencial y hasta estuvo en la Casa Rosada el ministro de la Producción, Andrés Díaz Cano. A la salida del encuentro el funcionario sostuvo que "esperábamos alguna noticia favorable para el sector vitivinícola. El anuncio de las cargas patronales no es suficiente en la actual coyuntura".
Ángel Leotta, titular de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar), también presente en el acto, dijo que "esto no alcanza, los problemas de la industria pasan por otro lado, por ejemplo con las retenciones y los reintegros a las exportaciones". Incluso en enero hubo gestiones ante funcionarios nacionales sobre estas cuestiones (ver aparte).
Juan José Ramos, de los Viñateros Independientes, expresó que "el Presidente no ha entendido la gravedad de la crisis vitivinícola", mientras que Eduardo Garcés, de la Federación de Viñateros, manifestó que "la medida suma, pero no es lo que esperábamos". Pablo Martín, de los viñateros de Pocito, analizó que "el anuncio no alcanza en absoluto. Esperábamos medidas concretas para el sector".
Desde la Unión Industrial, Hugo Goransky, dijo que "es sólo un parche. Necesitamos medidas que no sean sólo mirar al dólar sino incentivar la producción".
Gestiones anteriores
Representantes de los gobiernos de San Juan y de Mendoza, productores y bodegueros vienen pidiendo desde hace rato medidas al Gobierno nacional para atenuar el impacto del sobrestock vínico que hay en este momento y evitar la caída de precios al viñatero, como son la quita de las retenciones a las exportaciones vitivinícolas y que se aumenten los reintegros. Pero hasta ahora no hubo respuestas.
El último contacto tuvo lugar en la segunda quincena de enero, cuando en Mendoza se reunieron, además de funcionarios de esa provincia, representantes locales encabezados por el ministro Andrés Díaz Cano, y de entidades locales, con funcionarios del Ministerio de Producción de la Nación encabezados por Damian Testori, jefe de gabinete del ministro Dante Sica.