Plata del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación que llega a la Corriente Clasista y Combativa (CCC) en San Juan y que va a directo a financiar las movilizaciones de esta organización. Si bien el dinero que entrega Nación es para beneficiarios con necesidades, parte del dinero termina alimentando la estructura de la organización que cuenta con flamantes carteles, camperas, chalecos y todo aquello para hacerse oír en la calle.
Cuando el año pasado tambalearon en San Juan unos 13.000 planes sociales, por gestiones del Gobierno sanjuanino se sostuvieron buena parte de esos beneficios bajo varias herramientas. Fuentes consultadas por este diario dijeron que unos 2.100 recalaron directamente en la CCC local. Desde el corazón de la organización, reconocieron que parte de la plata que reciben las personas cae en manos de la cúpula dirigencial; “como ocurre en otras”, se excusaron.
Según detallaron se encuadra dentro de lo que es un beneficio llamado Salario Social y que es de 4.700 pesos que cobran a través del Banco Nación y al menos unos 200 pesos (en algunos casos más) va a manos de quien lidera la organización, en este caso Vanesa Valle, además de obligarlos –toman lista, graficaron- a asistir a las movilizaciones.
“De otra manera no se entiende cómo disponen de tanta gente en la calle, las camperas, las banderas y el nivel de vida de algunos dirigentes, sólo basta ver en qué tipo de vehículos se movilizan”, dijo a DIARIO DE CUYO un encumbrado dirigente social que conoce como la palma de sus mano el manejo puertas adentro de la CCC.
Pero ¿cuál es el rol de la CCC en San Juan? Desde el mismo PRO sanjuanino, una fuente consultada en la delegación local del Ministerio de Trabajo dijo que “no es algo que yo pueda asegurar, pero está claro que quieren enrarecer el clima en la provincia”. La declaración de este dirigente macrista se da un día después que la CCC cortara calle Paula Albarracín de Sarmiento y realizara un piquete frente a la Casa de Gobierno, con la realización de una olla popular.
En el país
El pacto del ministerio que maneja Stanley fue con tres organizaciones sociales: Barrios de Pie, Movimiento Evita y la CCC. Lo hizo en noviembre del 2016, fue inicialmente por 30 millones de pesos y fue para apaciguar las aguas en un año –el primero de Macri- donde la inflación se desbordó.