Al parecer, en el bloquismo dieron por superado el conflicto interno que se desató por las duras críticas que el vicepresidente segundo, Pedro Medina, había lanzado en dirección al PJ. En la reunión del Comité Central que se llevó a cabo el viernes en la noche en la sede partidaria, el dirigente pidió la palabra para aclarar la situación, ratificó sus dichos y el tema quedó ahí. Fuentes que participaron del encuentro aseguraron que ninguno de los correligionarios le recriminó nada y que todo terminó con buen clima.
Medina se había quejado de la poca participación que el PJ le da al bloquismo en el Gobierno provincial, en referencia a la cantidad de cargos, y hasta puso en duda las posibilidades de reeditar la alianza para las elecciones legislativas de 2013 si la situación no cambia. Frente al tenor de las declaraciones, Mauro Marinero, que es el vice primero, y el diputado Jorge Espejo salieron públicamente a decir que no están de acuerdo con las críticas, reivindicaron la sociedad con el giojismo y aclararon que se trata de una opinión personal del ex ministro de la Alianza y no de la cúpula del partido.
Los dichos de Medina también generaron malestar en la presidenta del partido de la estrella, Graciela Caselles, quien actúa como fuerte sostén de la sociedad y llegó a ser nada menos que diputada nacional de la mano del justicialismo en la lista del Frente para la Victoria en los comicios 2011. Ella prefirió no arremeter contra el ex funcionario, pero desde su entorno íntimo aseguraron que el viernes se iba a hablar del tema y que la idea era pedirle al vicepresidente segundo de la fuerza que de ahora en más actuará de manera orgánica.
Efectivamente, el tema saltó a la mesa. Según las fuentes, Medina dio detalles de la nota periodística en la que disparó la batería de críticas hacia Casa de Gobierno y aclaró que así es cómo él piensa. Segundos después, contaron, tomó la palabra Caselles y no hizo mención a la cuestión ni le apuntó a su compañero de conducción. Por el contrario, aseguraron que les contó a sus correligionarios de la visita que la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, hizo a la provincia el jueves y que en la despedida no hubo ninguna polémica.