Primero, los días de altoparlantes anunciando su visita. Después, los colectivos cargando gente para verlo de cerca. Horas antes, un pollo con limón para recibir a ‘un animal de la política‘. Así es recordado Néstor Kirchner por Francisco Camacho, un sanjuanino considerado una pieza clave en el debut del santacruceño en la provincia.

En una visita de unas 14 horas, Kirchner llegó a San Juan por primera vez un 24 de agosto de 2001. Por ese entonces era gobernador de Santa Cruz, aunque ya pasaba por su cabeza la idea de ser presidente. Aunque su presentación principal fue en la sede vecinal del Barrio Santo Domingo (en Chimbas), Kirchner aprovechó para reunirse con el entonces gobernador sanjuanino, Alfredo Avelín.

‘A Kirchner lo conocía desde 1972, en las épocas de militancia en la Juventud Peronista (JP). Era un animal de la política‘, recuerda Camacho, que era representante municipal de Chimbas cuando Kirchner vino por primera vez. Por 1983, ambos compartían actividades comunes de la militancia justicialista, que impulsaba la candidatura presidencial de Italo Lúder, uno de los dirigentes más moderados del partido.

Antes de que Kirchner llegara a San Juan, ya se habían mantenido encuentros previos en Buenos Aires con representantes del santacruceño. Hasta que todo cerró con una conversación telefónica clave. Según Francisco Camacho, Kirchner llamó para preguntarle: ‘¿Vos me asegurás que podés juntar 200 personas (para que participen del acto en Chimbas)?‘. ‘Yo le respondí que le aseguraba la asistencia de 500 personas‘, recuerda Camacho tras precisar que finalmente concurrieron 2 mil.

Me interesaba traerlo porque siempre lo consideré ‘un tipo sin miedo a nada‘, aclaró. Camacho (68 años) comenta que fue el primero en llegar al aeropuerto para esperar al santacruceño. Después llegó el por entonces diputado provincial, Tulio Del Bono.
Recién a las 16,30 pudieron almorzar en una parrilla en la zona este de la ciudad de San Juan, a la que asistió el por entonces intendente de Chimbas José Camacho, hermano de Francisco. Kirchner ‘comió pollo asado con mucho limón para cuidar su salud‘, recuerda Francisco tras precisar que para esa primera visita a San Juan tuvo que alquilar ‘siete micros para traer gente. Estuve diez días con dos parlantes recorriendo Chimbas‘, comentó Camacho, que vivió en Santa Cruz entre 1981 y 1987.

Allí fue secretario técnico de la legislatura santacruceña. De esa época, Camacho nunca olvida los asados que compartió con Kirchner.

Al por entonces intendente Camacho ‘tuve que insistirle para que estuviera en el almuerzo con Kirchner‘, recuerda Francisco. Cuando el ex intendente se encontró con un tipo ‘tan revolucionario como Kirchner hubo como un amor a primera vista‘, comenta Francisco, actual director administrativo de Desarrollo Humano de la provincia.

Lo del encuentro que mantuvo por la tarde con Avelín fue porque el propio Kirchner quiso saludar al entonces gobernador por su defensa a los Hielos Continentales. Kirchner, que se hospedó en el por entonces hotel Nogaró, es recordado por Camacho como un personaje muy simpático. En una ocasión, ‘yo iba en un auto por Buenos Aires con un dirigente santacruceño. De repente se nos acerca un coche. Abren la ventanilla y sacan la mano con una especie de arma de juguete, simulando un asalto. Era un chiste de Néstor‘.

Cuando murió ‘sentí que se iba una persona que todavía le faltaba mucho por hacer‘, remató Camacho con la voz entrecortada.