La decisión del juez Pablo Oritja para que Salud Pública realice análisis de sangre a los pobladores cercanos a la zona de influencia de la mina Veladero está en duda. Es que el magistrado debe resolver la presentación realizada ayer en Jáchal por parte del Defensor Oficial del Pueblo, Julio Orihuela, quien pidió en nombre de la Asamblea Jáchal No se Toca que se revoque esa medida y se hagan otro tipo de estudios. Según explicaron fuentes calificadas, la solicitud se basa en que el grupo antiminero entiende que el análisis de sangre no es el indicado para determinar si hubo o no contaminación en las personas por los sucesivos incidentes y por la actividad que viene desarrollando el emprendimiento minero.
Oritja explicó que “Orihuela ha recurrido la orden emitida para que se realicen análisis de sangre a la población, pidiendo que se realicen otro tipo de estudios”.
Oritja también ordenó el freno de la actividad en la mina, hasta asegurar que no hay riesgo en la población.
El grupo de vecinos que impulsó el pedido ante el Defensor Oficial está constituido por unas 15 personas que integran la Asamblea Jáchal No se Toca, agrupación que está en contra de la mina Veladero.
La alternativa propuesta en la presentación es un “mineralograma intracelular por espectrometría con el método Raman”, algo que no es invasivo y se realiza con una muestra de piel, dijeron fuentes calificadas. Oritja no indicó si le hará lugar a la presentación, pero si resaltó que tomará la decisión a la brevedad.
El juez le había solicitado al Ministerio de Salud Pública que lleve a cabo análisis de sangre a los habitantes de 7 pueblos de Jáchal e Iglesia, que están dentro del área de influencia de la mina y le había dado a la cartera del Ejecutivo un plazo de 30 días para cumplir con el cometido. Ahora esa medida puede cambiar, siempre y cuando Oritja le haga lugar al planteo realizado por los vecinos de Jáchal.
Por otro lado, el magistrado ya había habilitado a la Universidad Nacional de Buenos Aires (UBA) a que participe de esos análisis.