Los precandidatos a gobernador respondieron ayer sobre al protocolo del aborto no punible que publicó hace poco el Ministerio de Salud de la Nación y que tanta polvareda levanta. Alfredo Avelín, Roberto Basualdo y Martín Turcumán aseguraron que es inconstitucional y que no lo aplicarán si son electos, en tanto que Ruperto Godoy, Alberto Agüero y Mary Garrido adelantaron que sí lo instrumentarían. Benjamín Kuchen sostuvo que aquí hay que redactar una guía propia y Sergio Uñac señaló que su idea es implementar un reglamento de naturaleza provincial en caso de que el nacional amplíe las excepciones permitidas por el Código Penal, como acusan los que se oponen a la iniciativa.

La opinión de los postulantes al máximo cargo provincial se conoce luego de la fuerte reacción que se desató contra el protocolo oficial. La cúpula nacional de la Iglesia denunció que la administración kirchnerista alienta los abortos, mientras que San Juan monseñor Alfonso Delgado asemejó el documento al régimen de Hitler y algunos sectores salieron a cuestionar las medida por entender que legaliza ese tipo de práctica.

El debate no es nuevo y pone en juego el derecho del niño por nacer y el derecho de la mujer de decidir sobre su propio cuerpo. De los precandidatos que se refirieron al fondo de la cuestión, Basualdo, Uñac, Turcumán y Avelín se mostraron a tono con la línea que priorizar el primero y Godoy y Garrido pusieron el énfasis en la necesidad de proteger la vida de las mujeres.

Los puntos que levantan polémica son varios. El documento fija en uno de sus apartados que se debe practicar un aborto no sólo cuando está en riesgo la vida de la madre sino cuando se sienta afectada moral y psicológicamente. Otro establece que basta con una declaración jurada de la víctima de una violación y que no se le puede exigir que dé detalles o que presente un denuncia policial o judicial u otra constancia. Además, define que la decisión de la mujer "es incuestionable y no debe ser sometida por parte de los profesionales de la salud a juicios de valor".

Mientras la puja levanta temperatura, grupos religiosos de todo el país prometen marchar el jueves de esta semana. Quieren ir a los parlamentos de cada jurisdicción a pedir que la guía kirchnerista no se ponga en marcha.