Un estudio técnico que realizó el Poder Judicial reveló que para solucionar los problemas inmobiliarios que arrastra, necesita casi tres veces más espacio de lo que ocupa actualmente. Según el informe, el edificio de Tribunales y los locales alquilados para el funcionamiento de distintos organismos suman unos 17.000 metros cuadrados y para contener adecuadamente toda la estructura judicial hacen falta 43.500, de lo que surge que ni siquiera con la afectación del 9 de Julio sería suficiente. Una de las ideas que se barajan consiste en levantar un tercer edificio, pero es difícil porque demanda financiamiento y, por ahora, no se consigue.
La falta de espacio ya es un tema crónico. Hace años que las instalaciones del edificio 25 de Mayo, donde está enclavado Tribunales, quedaron chicas y la Corte de Justicia tuvo que salir a alquilar inmuebles que medianamente se adaptaran a las necesidades de un organismo judicial.
La expectativa de solucionar el problema surgió a partir de un proyecto para levantar la llamada Ciudad Judicial. La idea tomó fuerza cuando el Ejecutivo construyó el Centro Cívico, desalojó el 9 de Julio y decidió entregárselo a la Justicia, para que instale dependencias que hoy están desperdigadas por toda la ciudad en los edificios alquilados. Pero lo cierto es que, según los datos del informe, eso no alcanza.
El informe, elaborado por el Departamento Servicios Generales del Poder Judicial, a cargo de Augusto Rago, indica que la superficie necesaria es de 43.500 metros cuadrados. Número que está muy lejos del espacio disponible que hay hoy. El 25 de Mayo tiene 6.170 metros cuadrados y los 19 edificios alquilados equivalen a 10.923, lo que suma apenas 17.093 metros cuadrados. Es decir, hace falta casi el triple de espacio para llegar al número óptimo.
El plan de hacer una Ciudad Judicial busca concentrar toda la estructura judicial en la misma zona y en edificios propios. Inicialmente se pensó anexar el 9 de Julio, que tiene 12.173 metros cuadrados. Así, incluso sin dejar de alquilar, la Justicia alcanzaría a tener 29.266, lo que seguiría siendo insuficiente.
El dilema se ve a simple vista. En el edificio 25 de Mayo, los juzgados de primera instancia tienen una superficie de entre 70 y 90 metros cuadrados, hay pilas de expedientes en los escritorios y el piso, los empleados prácticamente no tienen lugar para desplazarse y no cuentan con espacios amplios y seguros para tomar audiencias, ni siquiera cuando se trata de presos peligrosos. Las salas de juicios, en el mejor de los casos, son de 155 metros cuadrados, alcanzan nada más que para un puñado de personas y los imputados están apenas a unos pocos metros de sus acusadores, los fiscales, y los jueces que deben decidir si irán presos.
Además, hay una sola escalera para acceder a los pisos superiores y es compartida por empleados, funcionarios, abogados y delincuentes que son llevados a declarar. Y para peor, el subsuelo debería usarse sólo para archivo, pero en realidad funcionan allí, sin vías de escape ni ventilación, distintas dependencias, entre ellas los calabozos y una biblioteca que es visitada diariamente por decenas de abogados, estudiantes de derecho y personas comunes.
La suerte de los edificios alquilados no es mejor. La mayoría están sumamente deteriorados y en algunos, como los de Paz de Capital, hay expedientes apilados hasta en las escaleras. Y en los Juzgados de Menores, un pasillo de un metro de ancho se improvisa como sala de espera.
Los 43.500 metros que se determinan como óptimos para el funcionamiento de la Justicia surgen de adaptar las medidas. Por ejemplo, explicó Rago, los juzgados deberían tener unos 280 metros cuadrados y las salas de juicio no menos de 400.
El estudio indica que para satisfacer toda la demanda de espacio y no seguir pagando alquileres, además del 9 de Julio y el 25 de Mayo, haría falta construir un nuevo edificio de algo más de 15.000 metros cuadrados, 5.000 metros de conexiones entre los inmuebles y cocheras de 5.000 metros. El principal escollo es el financiamiento.
En 2009, cuando en la cuenta no se incluía el costo de levantar un tercer inmueble de grandes dimensiones, la Corte de Justicia y el Ejecutivo se comprometieron a gestionar los recursos que hacen falta para refaccionar el edificio 9 de Julio y conformar la Ciudad Judicial. Hasta hoy, no hay novedades.