Luego de que se conociera el plan que busca implementar el Servicio Penitenciario Provincial para que los presos puedan salir a la calle a trabajar en diferentes obras públicas, empezando por un convenio con el municipio de Rivadavia, la Justicia descartó que aquellos internos condenados por delitos graves como homicidios o abusos sexuales puedan acceder al beneficio.
Según contó ayer en radio Estación Claridad el director del SPP, Enrique Delgado, el objetivo es implementar un programa de reinserción que tiene el sistema penal para que los presos puedan tener un oficio a la hora de acceder a la libertad. Sin embargo, no todos los internos podrán ser parte de la iniciativa.
La jueza de Ejecución Penal, Lidia Reverendo, explicó que los presos que fueron condenados por cometer delitos graves, como homicidios o abusos sexuales, no trabajarán en la calle porque ni siquiera pueden contar con salidas anticipadas, al igual que aquellos que son reincidentes.
“Por ley no puedo dárselas (a las salidas transitorias). Mi criterio es que las condenas deben ser cumplidas dentro del SPP, pero un chico de 20 años, que por problemas de droga o cultura, arrebata una cartera y está seis meses preso, debe ser preparado por la ley para que cuando salga tenga una buena reinserción, ya que es una realidad que vuelvan a la sociedad”, dijo.
A continuación, afirmó que “los internos serán evaluados de acuerdo a la progresividad dentro del Servicio Penitenciario Provincial. Ellos tienen un periodo de condena y, de acuerdo a su conducta, sus labores y sanciones, van avanzando para tener libertades anticipadas como la salida transitoria, que pueden ser dos días a la semana. Yo, particularmente, otorgo salidas de un solo día de 7 a 21”, detalló Reverendo en Estación Claridad.
En ese sentido, la magistrada dijo que “en esa semi libertad, los penados pueden salir a trabajar para empezar a volver a la sociedad luego de que el Servicio Penitenciario los reeducara. El director Delgado entendió que esa posibilidad de sociabilizar sea con trabajos mediante convenios con municipios, pero para eso el interno debe tener una excelente conducta, un buen concepto después de un tiempo y también un trabajo psicologico”.
El Penal realizará la selección de internos teniendo en cuenta las premisas anteriores y luego los jueces de Ejecución Penal serán los que autoricen o no. “Siempre miramos que se cumplan los requisitos y que la persona esté próxima a volver a la sociedad. Yo no debería mirar la condena para hacer valoraciones porque a esa tarea ya la hizo el juez de Garantías, pero siempre se ve y yo particularmente valoro mucho que los beneficiados estén cerca de salir sin poner en peligro a al sociedad”, expresó.
Al ser consultada sobre si habrá una remuneración para aquellos privados de la libertad que desempeñen tareas en la calle, aseguró que el denominado peculio consiste en pagarles un “sueldo” simbólico, que ronda los 5 o 10 pesos por hora. “El pago es mínimo, esto es algo que siempre está en la fantasía colectiva porque quizás falta un poco de docencia, deberíamos salir más en los medios y, por supuesto, me hago cargo también”, reflexionó la jueza, y agregó que “yo también he sido víctima de delitos y todos queremos el castigo para los delincuentes, pero ya privarlos de la libertad es un castigo. Sí sostengo que hay que capacitarlos y educarlos porque pueden salir con más resentimiento. Tienen que aprender a dignificarse”.
Por último, Reverendo informó que un alto porcentaje de internos está en condiciones de poder salir a la calle para trabajar como busca el director Enrique Delgado. “La gente que tiene salidas transitorias es un número importante. Actualmente, el Penal debe tener unas 1.800 personas ya que hay sobre población en un lugar apto para 900. En ese contexto, la mayoría de los internos tiene penas de 5, 6 o 7 meses, por lo que al poco tiempo de permanecer allí ya puede obtener beneficios”.