“A vos te encargo que tracciones para poner la Oficina de la Mujer, ya que San Juan es uno de los pocos distritos que no la tiene”, le dijo la ministra de la Corte Suprema de Justicia a su par provincial, Guillermo De Sanctis, apenas asumió. El pase de factura se dio en el marco de la “relación amistosa” que el cortista local aseguró que mantienen desde que este fue secretario de Justicia de la Nación y ella, camarista civil, en 2002. El máximo tribunal creó el organismo y De Sanctis señaló que invitó a la suprema a la inauguración formal en febrero, a la que se comprometió asistir. Pero no sólo eso, ya que el Poder Judicial pondrá en marcha el registro de Violencia Doméstica, el cual servirá para que los jueces y fiscales conozcan al instante los antecedentes de maltrato hacia las mujeres por parte de un agresor, tomar medidas preventivas y así proteger a las víctimas. Y además, será útil para conformar un mapa de ese tipo de delitos.
La movida apunta a un compromiso de la Corte con la “perspectiva de género, en favor de la protección y realización plena de la mujer, con el acceso a la Justicia para luchar contra la discriminación y los ataques que puedan sufrir”, resaltó De Sanctis. La Oficina de la Mujer fue creada la semana pasada a través de una acordada, en la que se establece que articularán la posibilidad para que las mujeres accedan al servicio judicial a través de los programas que llegan a las comunidades, zonas rurales y alejadas. El organismo hará un seguimiento y colaborará con los juzgados que tramiten causas de violencia de género para que se cumplan con medidas como una restricción hacia el maltratador, indicó el cortista. Además, la Corte ya tiene listo el Registro de Violencia Doméstica. El subsecretario Administrativo, Mauricio Cerezo, explicó que en febrero habrá capacitación del personal que se encargará de operarlo y que en marzo estará en pleno funcionamiento. En el mismo se cargarán las denuncias judicializadas por violencia intrafamiliar.