Un nuevo capítulo se escribe en la historia estremecedora que envuelve al ginecólogo Carlos Martínez, quien fue acusado de abuso sexual por 13 pacientes.

 

 

En esta ocasión, su causa salpica al Segundo Juzgado de Instrucción Penal del juez Pablo Flores por una denuncia que una víctima radicó en 2013 y porque, posteriormente, el caso prescribió.

 

Luego de conocer este hecho, la Corte de Justicia decidió auditar dicho juzgado y suspender la licencia que había pedido el juez hasta que termine el proceso de investigación.

 

Según los datos que manejan en la Corte, el ginecólogo fue procesado por abuso sexual simple en el 2013, la resolución fue apelada. En el 2014, la Cámara Penal no lo admitió y regresó la causa al 2do Juzgado y desde entonces se encajonó por lo que prescribió.

 

Este detalle llamó la atención de los ministros de Justicia y pidieron auditar el juzgado y “revocar la licencia del juez a fin de que sea gozado cuando haya terminado la auditoría”.