La designación de un juez que frenó esta semana la Cámara de Diputados, no le dejó otra opción al Consejo de la Magistratura que congelar uno de los concursos que está llevando a cabo para cubrir otra vacante de juez. La cosa es así: uno de los ternados para el Juzgado de Instrucción Nº 1 está inscripto al mismo tiempo como aspirante a la Cámara Penal y mientras no se defina si será juez o no en el primer caso, no se puede avanzar con la conformación de la terna en el segundo.
La particular situación es un desencadenante de un hecho que llamó la atención en la comunidad jurídica y política. Cuando esta semana los diputados se preparaban para entrevistar a los ternados para juez de Instrucción Nº 1, uno de ellos renunció. Luis Pelayes decidió no seguir adelante por razones personales y sólo quedaron con chances dos postulantes, que son Ricardo Moine y Maximiliano Blejman. Los legisladores tenían que designar el juez el jueves, pero lo postergaron y le mandaron las actuaciones al Consejo de la Magistratura para que nomine a otro abogado en reemplazo de Pelayes.
Al mismo tiempo, el Consejo de la Magistratura entrevistó a los inscriptos para el cargo de juez de la Sala III de la Cámara Penal. Tenía previsto esta semana armar la terna con los que mejor califican para mandarla a Diputados, pero congeló el proceso. Pasa que entre los aspirantes está Moine, que al mismo tiempo participa en la definición por el cargo anterior, y el proceso se ve condicionado.
En definitiva, mientras no sea designado el juez en el primer concurso, el segundo no puede seguir. Antes de eso, el Consejo de la Magistratura tiene que decidir si hace caso al pedido de Diputados de nominar un nuevo ternado, en lugar de Pelayes, o si considera que los legisladores deben seguir adelante con los dos postulantes que siguen en carrera.
Hay un elemento más a tener en cuenta. La terna del primero concurso fue formada por el Consejo de la Magistratura con el cortista Juan Carlos Caballero Vidal como miembro. Pero hoy está de viaje por Europa y sin él, el órgano no puede decidir qué hacer. Ayer, en Tribunales calcularon que estará de vuelta el 18 de este mes. Recién ahí, podrán resolver acerca del primer caso y destrabar la situación que se generó por la llamativa renuncia de Pelayes.
