El secretario de Gobierno de Ullum, Edgar Pelayes, quedó en la mira de la Justicia luego de que la Policía allanara su casa y encontrara una carabina de calibre 7.62 de la que no tiene autorización. Ahora, enfrenta una causa penal en su contra y para zafar de ir a la cárcel en lo inmediato, presentó un pedido de eximición de prisión. Es la segunda vez que el departamento es noticia por un escándalo protagonizado por funcionarios públicos de esta gestión: en mayo, el diputado departamental fue hasta el municipio con un megáfono a reclamarle al intendente que cumpla las promesas de campaña y terminaron a los gritos ante la incredulidad de empleados y vecinos.
La investigación judicial causó sorpresa y conmoción en el municipio comandado por el basualdista Daniel Albarracín, quien puso en duda la continuidad del funcionario en el caso de que sufra un revés del Poder Judicial. "No voy a aprobar a alguien que esté fuera de la ley. Voy a respetar lo que diga la Justicia y tomaré las medidas que sean necesarias. Si es conveniente, se tendrá que ir", aseguró el intendente.
El delito investigado parte de una pena mínima de 2 años de prisión, por lo tanto, contempla la excarcelación. Y en el caso de recaer una hipotética condena, tiene un castigo que puede llegar hasta los 6 años de cárcel.
Como secretario de Gobierno, Pelayes ocupa un puesto clave en el municipio (el primero en su carrera) y es un hombre de confianza de Albarracín. En una entrevista con DIARIO DE CUYO, dijo que la carabina no es suya y que estaba en su hogar porque se la guardó a un amigo, quien cuenta con toda la documentación como legítimo usuario, según manifestó. Con el avance de la causa, admitió que fue un error hacer ese favor y negó rotundamente que se dedicara a la caza furtiva. El funcionario quedó involucrado luego de una serie de allanamientos que realizó la Brigada de Investigaciones Sur en el departamento, en busca de armas y elementos que suelen utilizar los cazadores de animales (Ver aparte).
El primer escándalo protagonizado por los basualdistas ulluneros estalló cuando el diputado departamental, Leopoldo Soler, fue con un megáfono al municipio y le reclamó a su compañero de fórmula que lo tuviera en cuenta en las decisiones del municipio. Se trenzaron en una fuerte discusión, se dijeron de todo y desde ahí no se pueden ni ver.
Ahora estalló el caso Pelayes. El viernes, la Policía allanó su casa del Barrio Dique y él no estaba. Los uniformados, con orden del juez Leopoldo Zavalla Pringles, encontraron el arma y 20 proyectiles ocultos en el armario de la ropa de sus hijos, según las fuentes. El secretario confirmó que la carabina fue escondida en ese lugar porque su esposa se puso nerviosa y agregó que las municiones eran 4 o 5.
Tras el procedimiento, Pelayes, a través de su abogado Moine, presentó un escrito en el que solicitó la eximición de prisión. El juez Zavalla Pringles señaló que aún no resuelve el pedido para que el funcionario no quede preso tras declarar y que todavía no fijó la fecha de indagatoria. Sobre el futuro político del secretario, Albarracín remarcó que "no voy a permitir nada fuera de la ley. Hay que dar una muy buena imagen, tanto el intendente como la gente que trabaja a su lado".

