La delegación local del Ministerio de Trabajo de la Nación citó al rector de la Universidad Nacional de San Juan, Benjamín Kuchen, para que de explicaciones sobre el reencasillamiento del personal de apoyo de la casa de estudios. Es porque hay una denuncia del gremio APUNSJ (Asociación del personal de apoyo de la UNSJ) que señala que la universidad estaría recibiendo más fondos desde el 2006 porque hubo una nueva distribución de las categorías, que significaba mejores ingresos para los empleados, pero no estaría aplicando los recursos para mejorar los ingresos de los empleados.
Si la UNSJ tuviera que pagar las diferencias salariales y de categorías a junio del 2006, cuando entró en vigencia el nuevo convenio colectivo de trabajo, se habla de un monto que rondaría los 10 millones de pesos, según señalaron fuentes de la casa de estudios.
Eso es lo que quiere determinar el organismo laboral, que podría tomar dos caminos. El primero sería obligar al rector, como cabeza de la UNSJ, a pagar las diferencias mal liquidadas a los empleados no docentes. Y en el caso de detectar irregularidades hasta podría derivar las actuaciones a la Justicia Federal para que se investigue si hubo fraude laboral. Por este tema Kuchen ya fue denunciado por el titular del área de Asuntos Legales de la universidad ahora suspendido, Cayetano Dara. Esa denuncia está radicada en la Secretaría Penal Nro. 5 del Juzgado Federal Nro. 2 de San Juan, a cargo del juez Leopoldo Rago Gallo, pero hasta el momento no ha tenido avances.
"No sé de qué se trata la citación”, dijo ayer el rector Kuchen, consultado sobre el tema. Y dijo que va a mandar a los abogados de la casa de estudios para que se interioricen sobre la investigación del Ministerio de Trabajo.
Sobre el tema del reencasillamiento sostuvo que "está todo en regla. Acá se trabajó sobre la base de un reglamento del concurso” y negó que existan esas diferencias salariales.
El conflicto comenzó cuando en junio del 2006 entró en vigencia un nuevo convenio laboral que establecía un reencasillamiento del personal aprobado en una paritaria local y remitido a la paritaria nacional. Ese convenio establecía nuevas categorías para 1.165 agentes no docentes, pero en la práctica eran 962 los empleados de la UNSJ.
Por denuncias y quejas del mismo personal el rector Kuchen anuló el convenio, con el aval del Consejo Superior. El mismo consejo decidió en aquel momento que se debía reemplazar la planilla en la que se informaba el reencasillamiento, pero el rector no lo habría hecho.
En la práctica habría agentes que deberían cobrar por una categoría superior, pero no lo están haciendo. Con el agravante de que la UNSJ estaría recibiendo los recursos nacionales para pagar las diferencias.
Ese es el tema que el gremio que agrupa al personal de apoyo universitario, que no incluye a los docentes, ha denunciado ante la delegación sanjuanina del Ministerio de Trabajo de la Nación.
La citación está prevista para el miércoles, a las 10, en las oficinas de la calle Catamarca, entre Córdoba y Santa Fe.