En medio de la crisis hídrica por la que atraviesa la provincia el Departamento de Hidráulica llevó adelante una reunión con el Consejo de Regantes para determinar el programa de cortes para lo que resta del mes de febrero. En función de la situación actual de escurrimiento de los ríos y de almacenamiento de los diques, se acordó que los cortes se realicen desde el viernes 25 de febrero hasta el miércoles 2 de marzo.
La definición es importante porque les permite a los regantes tomar las previsiones necesarias para regar, por ejemplo, las chacras y la siembra de algunos productos que se realiza por esta época.
En Hidráulica tuvieron que recurrir a intensificar el cronograma de cortes de la red de riego porque como se ha venido usando el agua de los diques por los bajos caudales del río San Juan, ahora se intenta recuperar los niveles mínimos necesarios de los embalses para la seguridad de las presas.
El otro refuerzo para el regadío del campo en San Juan es por medio de la batería de pozos. Respecto a este tema un estudio privado publicado el domingo por este diario reveló que en los dos últimos años bajó en San Juan, en promedio, 4 metros el nivel freático de los acuíferos. El dato es relevante porque es la mayor reducción del agua subterránea de los últimos 12 años, y cuando entre el 2010 y el 2019 el promedio de baja era de 1 metro por año. Además, en algunas zonas la merma llega a los 8 metros, un dato preocupante en el contexto de la actual crisis hídrica por la que atraviesa la provincia.
Cuando está faltando el agua de riego, en el Gobierno provincial han recurrido, dentro de la estrategia para sortear este problema, a la construcción de nuevos pozos, pero el problema es que el nivel de agua de los reservorios viene bajando en forma alarmante. Al punto que muchos pozos de los productores quedan "colgados", es decir sin la posibilidad de que las bombas sigan extrayendo agua porque el nivel de los acuíferos se viene reduciendo.