La Cámara de Diputados trataría mañana el proyecto de ley de modificación de la Ley de Administración Financiera en lo referente a la redistribución de partidas presupuestarias por parte del jefe de Gabinete de ministros.
Sobre las bancas habrá tres dictámenes, el de mayoría impulsado por el oficialismo, otro que agrupa al grueso de los legisladores de la oposición y el tercero, de Proyecto Sur, tras el que se encolumna alrededor de una decena de legisladores.
El dictamen del kirchnerismo, avalado por su aliados, y el del denominado "grupo A" de diputados opositores reúnen la misma cantidad de firmas (19), pero se considera que el de mayoría corresponde al oficialismo, por ser el que lleva la rubrica del titular de la comisión, Gustavo Marconato.
Esto le permitirá al Frente para la Victoria que su dictamen sea tratado en primer término, y que, en caso de no lograr imponerse en el número para aprobarlo, recién se ponga a consideración del pleno el de la oposición.
No obstante, fuentes legislativas se mostraron convencidas en que los diputados de ambos sectores continuarán conversando en las próximas horas para intentar acercar posiciones en torno a un texto más consensuado.
El proyecto de la oposición propone recuperar la redacción original del artículo 37 de la ley de Administración Financiera, en lo que respecta al artículo que señala que "quedarán reservadas al Congreso las decisiones que afecten el monto total del presupuesto, del endeudamiento previsto, los incrementos de gastos corrientes en detrimento de los de capital, los cambios en la distribución de las finalidades y el aumento de las partidas".
En los restantes dos artículos, se establece la devolución al Congreso de la facultad de asignar los excedentes de la recaudación tributaria y la restitución de un artículo de la Ley de Responsabilidad Fiscal en lo referente a los topes de gastos y endeudamiento de las provincias. El tercer dictamen, perteneciente a Proyecto Sur establece que el jefe de Gabinete podrá reasignar hasta el 10% del Presupuesto Nacional, pero sin cambiar la orientación de las partidas, y prohibe los DNU para reasignar excedentes.
Si Diputados aprueba el texto propuesto por la oposición, el proyecto debe volver al Senado, donde al kirchnerismo le bastaría la mayoría simple para ratificar su iniciativa.
