El ministro de Hacienda de la provincia, Aldo Molina, dijo ayer que San Juan tendrá presupuesto para el 2011 se apruebe o no el de la Nación, cuyo futuro es incierto por las diferencias que mantienen oficialistas y opositores en la Cámara baja.

Y adelantó que están próximos a finalizarlo y que la intención es presentarlo en la Cámara de Diputados de la provincia en los próximos días, aunque no precisó la fecha.

El funcionario fue optimista ayer al analizar un panorama sin la aprobación del presupuesto nacional porque dijo que "no se trata del fin del mundo ni por asomo".

Molina explicó que para la elaboración del presupuesto local no hace falta que ya esté aprobada la propuesta nacional. "No veo grandes problemas ni perjuicios para la provincia. En unos días más vamos a concluir con el presupuesto provincial", dijo el funcionario, aunque no quiso precisar un porcentaje de cuánto crecerá para el 2011. "Todavía no está terminado", dijo, y adelantó que "la prensa va a tomar contacto con los números en el mismo momento en el que lo hagan los diputados".

Otros años, sin embargo, el argumento oficial para demorar la definición del presupuesto sanjuanino fue que había que esperar que se establecieran los números a nivel nacional.

Incluso citó que hubo dos años, en 1995 y en el 2002, en los que la provincia no contó con el presupuesto local aprobado por la situación política imperante (ver aparte).

El presupuesto local para el 2010, que fue de 4.431 millones de pesos, es un 18 por ciento superior al del 2009, que contempló gastos y recursos por 3.727 millones de pesos.

El titular de Hacienda también dijo que no hay que preocuparse por las obras o la llegada de recursos si, finalmente, no hay aprobación del presupuesto nacional. Es porque "la Nación no se va a quedar sin presupuesto. La respuesta está en la ley de administración financiera, la 24.156, que en su artículo 27 dice que si al término del ejercicio no está aprobado el presupuesto, regirá el presupuesto anterior, al que habrá que efectuarle algunos ajustes y modificaciones".

Y puso como ejemplo que si hay un recurso para una obra que no se va a repetir, se elimina. Lo mismo que con un gasto que no se va a volver a presentar.

Sobre las obras, como el caso de la partida para construir el Centro Cívico de Rivadavia, dijo que "si el Poder Ejecutivo tuvo la decisión política de colaborar en ese financiamiento y por eso la incluyó, siguiendo el mismo razonamiento, incluirá la obra entre los ajustes del presupuesto del 2010".

"Y para eso tendrá que ir el intendente y hablar con el jefe de Gabinete, que es el autorizado en el marco de la ley de administración financiera para hacer las reasignaciones de partidas que correspondan para ejecutar normalmente el presupuesto", agregó.

Quien también coincidió con el ministro Molina fue el presidente de la Comisión de Hacienda y Presupuesto de la Legislatura local, Javier Ruiz. "No nos afecta en nada porque incluso ya tenemos las previsiones correspondientes de la coparticipación más allá de que no se sancione el presupuesto nacional", dijo el legislador.