El kirchnerista Frente para la Victoria terminó ayer con 28 años de hegemonía de la UCR en el gobierno de Río Negro con un contundente triunfo de Carlos Soria y cerró de la mejor manera el último test electoral antes de las elecciones presidenciales del 23 de octubre.

De esta forma el PJ y el Frente Grande, unidos en el Frente para la Victoria, lograron cambiar ayer el signo político que gobernó a la provincia de Río Negro desde la recuperación de la democracia en 1983.

Anoche, al cierre de esta edición, escrutados el 34 % del total de las 1.340 mesas habilitadas, Soria acumulaba el 53,69 % de los votos, sobre el 32,65 % del candidato de la UCR, César Barbeito. En tercer lugar, se ubicaba el ARI con apenas el 5,6% de los votos.

De esta manera, la formula integrada por Carlos Soria y su compañero de fórmula el jefe comunal de Cipolletti, Alberto Weretilneck, lograban romper los 28 años de hegemonía radical y volver a tener un gobernador peronista, luego de 38 años.
Ante la tendencia irreversible de los cómputos, Barreito, candidato de la oficialista Concertación para el Desarrollo, delfín del actual gobernador, Miguel Saiz, un radical K, salió cerca de las 22 ha admitir su derrota en declaraciones efectuadas también en Roca.
“Somos respetuosos de la decisión del pueblo y reconocemos que Soria hizo una muy buena elección” afirmó el ex ministro de Educación provincial.

Mientras tanto, Soria aguardaba el arribo a Río de Negro del ministro del Interior, Florencio Randazzo para anunciar juntos la victoria que suma otro eslabón para el gobierno nacional.

La jornada electoral tuvo una alto nivel de participación en las urnas con un 76,60% del padrón, aunque también se destacaron las numerosas denuncias del kirchnerismo por la aparición de boletas truchas del Frente para la Victoria por lo que la Policía debió tomar partido y hasta hubo detenidos -ver aparte-.

Cuando concurrió a votar en General Roca, Soria advirtió sobre la adulteración del número en las boletas del FpV, que manos anónimas habrían colocado en los cuartos oscuros con la aparente intención de inducir votos nulos.

Anoche había festejos del peronismo en Bariloche, General Roca, Cipolletti y Viedma.

En la capital unas 500 personas se congregaron en las puertas de la casa de Gobierno, donde entonaron la marcha peronista, mientras cantaban la consigna “Volveremos, volveremos, como en el 73” recordando que, precisamente, en aquel año se produjo la última victoria del peronismo rionegrino con la candidatura a gobernador de Mario Franco. Por su parte la UCR festejaba en Viedma el triunfo local en la elección municipal, asegurando la reelección de Jorge Ferreira por un tercer período.