Después de la tensión contenida por más de 60 días de incertidumbre y el respiro por la confirmación del triunfo electoral que comenzó a gestarse el 20 de marzo y terminó el domingo, el dasnevismo de Chubut ya tiene un nuevo desafío: definir qué tipo de relación mantendrá su gobernador electo con la Casa Rosada después del desgaste por las reñidas elecciones que le dio un impulso inesperado al kirchnerismo.
La confirmación del triunfo de Martín Buzzi tras las elecciones complementarias en 6 mesas, puso ayer en el tapete si el gobernador electo tenderá puentes con el gobierno nacional o correrá el riesgo de quedar aislado.
En este sentido ya hubo un pronunciamiento el 12 de mayo, sólo tres días después que el actual gobernador de Chubut, Mario Das Neves fijara la fecha de las elecciones complementarias.
‘Si la Presidenta es la candidata del PJ, tendremos que evaluar qué hace el peronismo de Chubut. No hay que descartar acompañarla si decide ir a la reelección‘, decía Gustavo Mac Karthy, intendente de Trelew y compañero de fórmula de Bussi.
Por entonces, Das Neves había declinado su candidatura presidencial, pero ayer, envalentonado con el triunfo de apenas 384 votos, no descartó reactivar su sueño presidencial. ‘El dasnevismo no está muerto‘, es la idea que intentó transmitir Das Neves.
Con todo, en el dasnevismo, especialmente los dirigentes cercanos a Buzzi y el propio gobernador electo, son conscientes de que no es conveniente ‘sacar los pies del plato‘ y que ‘sería conveniente tener una buena relación con quien gobierne la Nación a partir del 10 de diciembre‘.
Buzzi, que ayer participó del primer acto como gobernador electo, sostuvo que ‘los alineamientos es una discusión que deberá darse, pero ‘está claro que es difícil gobernar sin una buena relación con la Nación porque a la larga los que pierden son los ciudadanos‘, añadió.
‘Las relaciones de la Nación con Das Neves están absolutamente rotas y por eso hasta tuvimos que salir a armar un fideicomiso. Pero una provincia no puede funcionar sin trato con la Nación‘, coincidió un dirigente cercano al gobernador.
Encausar una buena relación con la Rosada no debería ser traumático para Buzzi ya que Das Neves fue aliado del kirchnerismo hasta 2009 y, tanto él, como su rival en estas elecciones, Carlos Eliceche, trabajaron juntos dentro del Frente para la Victoria. Incluso tenían un vínculo fluido con el ex presidente, Néstor Kirchner.
Un guiño a la Nación de parte de Buzzi debería incluir otro asunto espinoso si Das Neves finalmente reactiva su candidatura presidencial por Modelo Chubut: una definición de respaldo o no a la eventual candidatura de CFK en busca de su reelección.
Por ahora, todas son especulaciones, pero no en vano, Buzzi salió la noche del domingo a festejar su triunfo con un discurso de tono moderado y conciliador. Es que sabe que le espera una parada difícil. Si no entra en sintonía tendrá un doble frente asediándolo. Por un lado, la Nación, y por otro, una importante oposición kircherista en distrito patogénico ya que varios departamentos quedaron en sus manos.