El Senado nacional aprobó hoy por mayoría, sin el acompañamiento de parte del bloque del PJ-Frente para la Victoria, el proyecto para modificar el impuesto a las Ganancias que consensuó el Gobierno con la CGT y los gobernadores y lo devolvió a la Cámara de Diputados.  

 

Catorce senadores kirchneristas de un total de 42 que integran el bloque PJ-FPV, rechazó apoyar el proyecto, tal como lo promovió el jefe del espacio Miguel Angel Pichetto, y se dividió entre la abstención y el rechazo.   El texto que se cerró el martes último tras arduas negociaciones resultó aprobada con 56 votos afirmativos pertenecientes al oficialismo, parte del bloque del PJ-FPV y senadores de otras expresiones minoritarias, tuvo dos votos negativos (Ruperto Godoy y Daniel Persico del PJ-FPV) y doce abstenciones del mismo espacio.

 

Las abstenciones fueron de los senadores kirchneristas Liliana Fellner, Marcelo Fuentes, María Virginia García, Anabel Fernández Sagasti, Hilda Aguirre, Ana Almirón, María Ester Labado, María Sacnun, María Pilatti de Vergara y Nancy González, del PJ-FPV; y de los peronistas puntanos Adolfo Rodríguez Saa y Liliana Negre de Alonso, de Compromiso Federal.  

 

El proyecto consensuado, que fue aprobado tras cuatro horas de debate, modifica la media sanción que la oposición logró imponer en la Cámara de Diputados en contra de los deseos del Gobierno.   El jefe del bloque del PJ-FPV, Miguel Angel Pichetto, reconoció antes de la votación que el bloque se manifestaría dividido y optó por no cuestionar la media sanción de Diputados, donde sostuvo que se planteó “un debate que estaba en el seno de la sociedad y en los sectores del trabajo y además no podemos obviar que los tres candidatos a Presidente, el que más o el que menos hablo de este tema, no es sólo en esta campaña sino en la campaña de 2013”.  

 

Ante el escenario que se le presentó al Senado, Pichetto señaló que ‘cómo decía (Leopoldo) Marechal, de los laberintos se sale por arriba‘ y resaltó que la sanción ‘es la ley posible e implica una mejora para los trabajadores‘ castigados, manifestó, por la apertura de las importaciones que ‘está afectando el trabajo argentino‘.   El presidente de la comisión de Presupuesto, Juan Manuel Abal Medina (PJ-FPV) destacó al inicio del debate que el proyecto era producto “producto de un consenso importante que se logró a posteriori de la media sanción” de la Cámara de Diputados.  

 

Además apuntó que “hoy pagan 2,2 millones de trabajadores y jubilados y el año que viene serian 2,7 millones de argentinos los que pagarían este gravamen” si no fuera modificado, pero tras los cambios aseguró que pasarán a tributar “1,4 millones” de personas.   Por su parte, Julio Cobos (UCR-Cambiemos) celebró el consenso alcanzado porque se evitó ‘un conflicto que iba a generar un costo fiscal muy grande‘. El kirchnerista Godoy justificó su voto en contra del proyecto en que pretende ‘otra gobernabilidad, con un peronismo que tenga ideas, que tenga propuestas, que sea una alternativa seria” y que, entre otras cosas, ‘piense en los trabajadores‘.  

 

A su turno, Fernando “Pino” Solanas anunció que acompañaría con su voto el proyecto acordado para modificar el impuesto a las Ganancias pese a que lo veía como una “claudicación frente al proyecto que venía de Diputados” y exhortó a sus pares a que dejen “de militar en la cultura de la derrota y tengamos el coraje y la dignidad para meter en el corralito a los cerdos que se comen la comida de todos”. 

 

Los puntos clave de la reforma en Ganancias

 

-El año que viene pagarán el impuesto a las Ganancias 1,4 millones de trabajadores y jubilados. Actualmente lo hacen 2,2 millones.

 

-El nuevo mínimo no imponible se eleva a 37.000 pesos brutos para casados con dos hijos, y a 27.941 pesos brutos para solteros.

 

-La ley tiene un costo fiscal bruto de casi 50 mil millones de pesos, pero el Gobierno informó que su aplicación demandará 34 mil millones de pesos, es decir, 7 mil millones más a lo dispuesto en el Presupuesto 2017. Esto es porque se prevé recaudar casi 7 mil millones con nuevos impuestos, y se estima un recupero por consumo de 9 mil millones.

 

-Las provincias no se verán perjudicadas ya que en la ley se incluye una cláusula de “garantía” de recursos vía una mayor distribución automática de los ATN (Aportes del Tesoro Nacional).

 

-Se mantiene el esquema del oficialismo de gravar las apuestas (son 9.000 millones de pesos) y se incrementa la alícuota del impuesto a las Ganancias para las utilidades de las actividades derivadas del juego del 35% al 41,5%.

 

-Habrá un impuesto del 15% al dólar futuro especulativo por única vez, pero no se gravará la renta financiera ni la actividad minera.

 

– Se fijan tres tipos de deducciones: a la ganancia mínima, por familiares y las deducciones especiales.

 

-Habrá beneficios para los trabajadores por viáticos y horas extras, y se establece en un 22 por ciento el monto que pueden deducir los trabajadores radicados en la Patagonia por zona desfavorable.

 

-A partir de enero de 2017, no sólo los jueces sino todos los empleados del Poder Judicial pagarán Ganancias.

 

-El ajuste de las deducciones y de las escalas será automático por ley en base al índice RIPTE, es decir que ya no se ajustarán por decreto.

 

– La deducción por cargas de familia se establece por cónyuge en 48 mil pesos, y por hijo de hasta 18 años en 24.432 mil pesos.

 

-La cifra no imponible para jubilados pasó de cinco a seis jubilaciones mínimas, lo que equivale a 33.500 mil pesos mensuales.

 

-Se incorpora la deducción por alquileres es de hasta un 40 por ciento, tomando como monto máximo casi 52 mil pesos.

 

-Para los monotributistas, las escalas se incrementan en un 75 por ciento.