El presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Fellner, analiza, en medio de presiones cruzadas, la medida a tomar en torno al tratamiento del proyecto para coparticipar la totalidad del impuesto al cheque, que la mayoría opositora aprobó la semana pasada en el Senado en medio de una nueva polémica.
Fellner recibió ayer, a su regreso de su provincia, Jujuy, la media sanción de la Cámara Alta que despertó una polémica entre oficialismo y oposición sobre su validez por el número de votos obtenidos que no alcanzaron la mayoría absoluta de ese Cuerpo (37) y requirió a versión taquigráfica de sesión del miércoles pasado en la que se aprobó.
El jujeño, no obstante, se escudó en un silencio hermético y evitó que se conociera algún indicio sobre la definición que piensa adoptar, y, hasta hizo trascender, que sólo él mismo o su vocero darían información al respecto, en una forma de eliminar presiones.
Ese silencio se enmarca con la actitud del kirchnerismo que, en voz de su jefe de bloque de diputados, Agustín Rossi, viene pidiendo desde la semana anterior que el tema no sea ni siquiera tratado en Diputados porque para el gobierno la sanción no existió al no cumplir con los 37 votos que demandaba la norma (fue aprobada por 35 contra 33).
Desde las filas K de Diputados se viene dejando en claro que la decisión política de la presidenta, Cristina Fernández, es rechazar de plano su tratamiento y se destaca con énfasis la presión ejercida por Rossi en las últimas horas en ese sentido.
Para el Gobierno la media sanción "es inválida" porque no fue votada con mayoría absoluta como -insiste- señala la Constitución para medidas impositivas y que, por eso, no debería tratarse en Diputados.
En cambio, desde la oposición, como la Coalición Cívica se respaldó la decisión del vicepresidente, Julio Cobos, quien en lugar de definir qué tipo de mayoría se precisaba para votar la iniciativa dejó en manos del Senado, con mayoría opositora, esa determinación que, como caía de maduro, se expidió por una mayoría simple. Tal responsabilidad le endilga el Gobierno a Cobos por esta votación que ayer, en medio de insistentes advertencias sobre que "cualquier particular podría denunciarlo", aparecieron dos abogados que lo hicieron y hasta pidieron una pericia psicológica al Vicepresidente -ver aparte-.
En el afán por defender lo votado por el Senado, los opositores argumentan que sólo se quitó "la especificidad" del gravamen pero no se alteró en esencia, por eso no era necesario una mayoría calificada.
Al respecto, la diputada de la CC Patricia Bullrich sostuvo que "el bloque oficialista no puede pedirle al presidente de la Cámara que viole el reglamento" y recordó que del artículo 22 del referido reglamento "surge que el presidente debe, sin más trámite, pasar el proyecto a la comisión respectiva con las sanciones procedentes del Senado o los proyectos enviados del Ejecutivo".
Para el denarvaizta, Gustavo Ferrari, Diputados debe tratarlo para "terminar con la dependencia absoluta de los recursos".
Sin embargo, la oposición baraja la alternativa, si el oficialismo elude el tratamiento de la sanción del Senado, de rescatar un proyecto de ley que va el mismo sentido de coparticipar la totalidad del impuesto al cheque, presentado en marzo último, firmado por diputados del Peronismo Federal y la CC.

