Raro ver la escuela vacía en una elección. A las 18,01, la presidenta de la mesa 19 de la escuela Antonio Torres, de Capital, hizo un ademán abriendo y levantando los brazos y dijo: "Se terminó". Después, invitó a pasar a los fiscales y todos se sentaron tal como lo hacen diariamente los alumnos en los bancos, a prestar atención frente a la pizarra. Así comenzó el escrutinio, al que tuvo acceso la prensa por primera vez en años, por una disposición del Tribunal Electoral de la provincia.
La presidenta de mesa fue también la encargada de llevar la urna hasta el interior del cuarto oscuro y abrirla. Ya habían escrito en la pizarra el nombre de cada lista y cada categoría a elegir. Mas tarde, fueron sacando uno a uno los sobres, abrían uno y hacían desfilar la boleta ante los ojos de cada presente, para luego acomodarlos sobre una mesa, separados por frente.
El corte de boleta fue el que más complicó el recuento. Cada vez que un voto estaba por partes todos fijaban su atención. Tanto, que en una oportunidad una de las fiscales decidió ubicarse en una mesa de la parte de adelante, para poder observar mejor.
El primer nulo llegó pasada la mitad de la parte de apertura de sobres, un elector había puesto un folleto propagandístico del candidato en lugar del voto. Alrededor de una veintena de votos más tarde apareció el primer voto en blanco. Y un par después, el segundo nulo: una boleta estaba cortada al medio y toda arrugada.
Una hora quince minutos después, fue abierto el último sobre. A partir de ahí empezó el conteo. Primero las boletas completas, después las cortadas, frente por frente. Consultas mediante, y pidiendo el acuerdo de cada presente en cada suma final, el recuento terminó en esa mesa, aunque continuó en gran parte de la provincia.
Escribir la última cifrar generó la satisfacción de saber que cada uno volvía a casa luego de una jornada de más de 12 horas de trabajo. La reflexión de uno de los encargados de la mesa entre risas: "Muy bien muchachos, terminamos todo sin discusiones. Armemos un grupo de Whatsapp, que no se corté", celebró en broma.