El ex presidente Fernando de la Rúa dijo ayer que no teme "en lo más mínimo" ir preso por la causa que se le sigue por presunta participación en el pago de sobornos a senadores durante su Gobierno, que quedó a un paso de ser elevada a juicio oral y público.
Al regresar de un viaje a Francia, el ex gobernante acusó de "falta de coraje" a los jueces de la Cámara Federal de Apelaciones que el martes confirmaron su procesamiento en el expediente y reiteró que la causa en su contra es "inventada".
"Me sorprende el fallo. Creo que hay falta de coraje de los jueces para decidir lo que corresponde", indicó en el Aeropuerto de Ezeiza.
"Si los jueces tienen miedo, ningún ciudadano puede estar tranquilo", matizó antes de insistir en que su procesamiento es "arbitrario".
