El nombre de Néstor Kirchner calado en el cartel del frente de la escuela, el escenario casi montado, la gente de Protocolo de Presidencia con los últimos detalles. Ese era el panorama ayer en San Juan cerca de las 9,30, cuando el secretario general de Presidencia, Oscar Parrilli, le llamó a José Luis Gioja para comunicarle que Cristina Fernández no viene hoy a la provincia, y que lo hará, con la misma agenda, el martes 30 de noviembre.
Fuentes cercanas al gobernador, explicaron que la medida -no se supo si nacida de ella o sugerida por su entorno- es en pos de preservarla de emociones, ya que se la vio muy consternada en los actos del Luna Park en Capital Federal y de Corrientes que encabezó el martes. En San Juan la esperan con la inauguración de una escuela con el nombre del santacruceño y un marco de público importante para darle aliento a la mandataria, lo que suma momentos emotivos a la mandataria.
Desde que murió Néstor Kirchner el 27 de octubre, la presidenta se mostró muy fuerte frente a la pérdida de su marido y soporte político de su gobierno. En el mismo velorio pocas veces se la vio quebrarse, y retomó la actividad oficial el mismo lunes luego de pasar un solo fin de semana de dolor al lado de los más cercanos.
Cristina homenajeó a su esposo, más allá de con el estricto negro de su vestuario, con palabras en algunas de las actividades oficiales que comandó. Pero el martes, el Luna Park se convirtió en un punto de inflexión y se conmovió hasta las lágrimas frente a 10 mil personas al recordar que "solamente tomé conciencia de que era acá, en este lugar, cuando entré, porque me acordé cuando entré con él, la última vez". Esa sensibilidad se mantuvo la noche del martes en el acto en Curuzú Cuatiá (ver aparte).
En este marco, Gioja ayer se limitó a comentar el llamado de Parrilli y aseguró que con ella no pudo hablar. El gobernador atribuyó la falta a la "reprogramación de tareas que hacen a la función de Estado". Y agregó que "lo que se iba a hacer mañana (por hoy) se va a hacer de la misma manera el 30, con las mismas escuelas, la número 1.000 en Albardón y el resto".
De todas formas, el gobernador recaló moderadamente en el sentido de que la visita se pospuso por razones anímicas: "no es una noticia que nos agrade mucho, pero hemos visto a la presidenta en distintos actos y la entendemos perfectamente".
No es la primera vez que Cristina no viene, estando todo listo para recibirla. El 28 de diciembre de 2009 su visita para una entrega de viviendas se frustró por una tormenta en Buenos Aires que no la dejó despegar. Igual dirigió la ceremonia en el Aldo Cantoni, vía teleconferencia.

