La presidenta Cristina Fernández de Kirchner reclamó anoche a los países de "mayor responsabilidad y liderazgo" que realicen "una acción efectiva para que sea restituido el presidente hondureño Manuel Zelaya y pueda haber elecciones en el marco de la Constitución en noviembre".
La jefa de Estado confirmó que en la reunión que mantuvo ayer por la mañana en Nueva York con sus colegas de España, José María Rodríguez Zapatero, y de México, Felipe Calderón, se acordó el respaldo de los tres países al pedido de Brasil para que se convoque al Consejo de Seguridad por la crítica situación `que se vive en Honduras por el golpe cívico militar.
Fernández de Kirchner hizo estas declaraciones a la prensa antes de participar en la recepción que ofreció el mandatario estadounidense, Barack Obama, a los participantes del grupo de los 20 que llegaron a Pittsburgh (EEUU).
"De seguir esto así, podría terminar en un baño de sangre. No podemos los organismos multilaterales estar impávidos ante esto", advirtió la jefa de Estado por la mañana.
Horas después, la presidenta se reunió con líderes de la Confederación Internacional de Sindicatos, ante quienes aseguró que reclamará en la Cumbre del G20 que se apliquen medidas activas de generación de empleo, para reducir la tasa de desocupación generada por la crisis económica mundial.
La presidenta participará hoy de la Cumbre del G20, que tendrá como sesión plenaria "Los desafíos de la recuperación", vinculada a la crisis financiera internacional. La Cumbre se desarrollará en el Lawrence Convention Center y se iniciará a las 9.30 (10.30 de la Argentina) con la sesión plenaria titulada "Los desafíos de la recuperación".
Anticipándose al encuentro, el ministro de Economía, Amado Boudou, confirmó que durante su estadía en Nueva York mantuvo contactos con inversores y bancas de inversión para "conocer su opinión" respecto al acuerdo que busca cerrar la Argentina con los bonistas que no adhirieron al canje de la deuda en default.
Ayer a última hora, el funcionario argentino esperaba reunirse con su homóloga francesa, Christine Lagarde, para hablar de la deuda que mantiene su país con el Club de París.