El proyecto que diseñó la gestión giojista para recuperar la histórica ruta 12 y transformarla en un atractivo circuito turístico, dio un paso fundamental. La construcción del primer tramo está en etapa de licitación y ayer se supo que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) dio el visto bueno para financiar los más de 400 millones de pesos que demandará el segundo, que permitirá llegar en forma directa a Calingasta. Cuando la obra esté terminada se podrá viajar de nuevo desde Zonda hasta el departamento cordillerano, con la diferencia que será por un impactante y bello camino que bordeará el perilago de los diques Punta Negra y Los Caracoles.
La vieja ruta 12 estaba muy deteriorada y sufría constantes cortes por las inclemencias del tiempo, hasta que en 2004 fue inhabilitada en forma permanente para poder construir el grueso del dique Los Caracoles. Como en un par de años más terminará de quedar bajo el agua cuando se llene Punta Negra, el Gobierno provincial se propuso recuperarla y proyectó una megaobra que consiste en la construcción de una nueva traza de mayor altura a la que existe hoy.
Los trabajos se ejecutarán en dos etapas. La primera es de 19 kilómetros y va del Cerro Blanco (Zonda) a Los Caracoles. La segunda tiene 30 kilómetros y se extiende desde la represa hasta Pachaco, para empalmar con la 149 que lleva a Calingasta (ver infografía).
El primer tramo está en pleno proceso de licitación y también será financiado con fondos del BID. Ayer se abrieron los sobres de la licitación en un acto que se llevó a cabo en Casa de Gobierno y las cinco ofertas que se presentaron estuvieron muy por encima de los 335 millones de pesos del presupuesto oficial (ver foto).
José Luis Gioja aprovechó el acto para anunciar que el organismo internacional ya le dio el OK a la segunda etapa de la obra, cuya inversión se calcula que rondará, al menos, los 450 millones de pesos. Junto a él estuvo un funcionario nacional que es clave para el éxito de las gestiones estatales por créditos internacionales. Se trata de Pablo Abal Medina, el coordinador nacional de Programas y Proyectos con Financiamiento Externo, con quien el Gobernador mantiene muy buenas migas.
En Casa de Gobierno celebraron la noticia y mucho. Sucede que la devolución del préstamo irá en su mayoría por cuenta y orden de la Nación. En conclusión, la megaobra le costará mucho menos al Estado provincial.
De acuerdo a los cálculos oficiales, el primer tramo se adjudicará el mes que viene y casi de inmediato empezará la construcción. La orden que bajó Gioja ayer entre sus colaboradores es que mientras se ejecuta esa obra, los técnicos comiencen a trabajar en la elaboración del proyecto del trayecto que unirá Los Caracoles con Pachaco. “No manejamos plazos, es un proyecto muy complejo y nos va a llevar tiempo”, aseguró el titular de Vialidad Provincial, Edgardo Güerci, sin querer arriesgar fechas de finalización.
Como la geografía en la zona es muy irregular, el ministro de Infraestructura, José Strada, dijo que van a tener que repetir la estrategia que utilizaron para delinear el proyecto de la primera etapa. Esto es, empezar sobrevolando el terreno para determinar cuál sería la mejor traza de la ruta y si hay que hacer trabajos complementarios.
La obra completa permitirá rescatar la antigua ruta que lleva a Calingasta, pero con una traza que será entre 80 y 90 metros más alta y que promete mucho para el desarrollo del turismo local. En casi 50 kilómetros combinará las bellezas que ofrecen las montañas, el río San Juan y el espejo de agua de Los Caracoles y Punta Negra, además del Tambolar cuando se construya.
Además, será una solución para los calingastinos. Con la ruta 12 cortada, desde el año 2006 no tienen otro remedio que transitar el camino que va por la Quebrada de las Burras para llegar a la ciudad. Si bien cuenta con menos pendientes, es mucho más largo.

